No se sabe bien si es un contratiempo o no, pero el encontronazo sufrido por el delantero del CD Castellón, David Cubillas, en el minuto 14 del partido contra el Atlético de Madrid B en Castalia le obligará a tener que jugar con una protección. Una máscara personalizada como ya hizo durante varias jornadas de la temporada pasada, la 2018-19. El futbolista se dio cuenta del percance sufrido inmediatamente y abandonó el terreno de juego casi con lágrimas. El goleador albinegro no quiere pasar por el quirófano y prefiere jugar con la protección.

Es una situación similar a la de la recta final de la pasada campaña. El pasado 29 de abril, para ser más exactos. Fue en el Camilo Cano de La Nucía donde el ariete castellonense también recibió un duro golpe en la cara, en el minuto 66. Aquello se tradujo en una fractura de varios huesos de la nariz y un hematoma en el ojo derecho. En esta ocasión, el ojo no resultó afectado.

Mucha sangre le salió a David Cubillas en Castalia el pasado jueves y apenas tuvo tiempo de saludar a su compañero Hicham Khaloua, que entró en su sustitución. El futbolista fue revisado por el médico del club, así como por el fisioterapeuta. Finalizado el partido, el delantero salió por la zona mixta de Castalia y comentó a lo medios de comunicación que no iba a pasar por el quirófano y que utilizaría la máscara personalizada con la que jugó varios encuentros con total normalidad la temporada pasada.

«Lo que haga falta por este escudo y esta afición. Y tranquilidad, gente... Nos quedan muchas alegrías. ¡Paciencia», comentó David Cubillas en sus redes sociales. El tuit tuvo 50 respuestas por parte de los seguidores albinegros, 22 retuits y 168 «me gusta».

Así es que el goleador castellonense estará a disposición del entrenador del Castellón, Sergi Escobar, para el inicio liguero que será el sábado 24 contra el Atlético Baleares en el feudo albinegro, pero con máscara.

De momento, la único baja confirmada para esa cita será la del cancerbero cordobés Jesús López, intervenido recientemente y que estará de dos a tres meses sin poder pisar un terreno de juego. El equipo seguirá preparando el choque las dos próximas semanas.