PSPV, Compromís y Podem-CseM-EU avanzan en las negociaciones para conformar un nuevo gobierno de izquierdas en el Ayuntamiento de Castelló tras mantener ayer una primera reunión conjunta, pero todavía mantienen diferencias en el programa y en el reparto de áreas. Los tres coinciden en que los trabajos van «de forma satisfactoria» y que el objetivo» es seguir con las políticas «de transformación social emprendidas en el Pacte del Grau». No obstante, las distancias aún son palpables y los tres proseguirán hoy con las negociaciones para intentar llegar a un acuerdo a la toma de posesión del sábado. El PSPV tiene garantizada la investidura al ser el partido más votado, pero no está asegurado que el pacto llegue a tiempo. Se podría dar el caso de que Amparo Marco fuera elegida este sábado alcaldesa y que luego prosiguieran las conversaciones para cerrar el acuerdo de gobernabilidad.

Las delegaciones de los tres partidos protagonizaron ayer el primer encuentro desde el 26M. Celebraron en la sede del PSPV dos reuniones, una por la mañana y otra por la tarde. Abordaron todos los temas posibles; estructura, programa y reparto de concejalías. Por la tarde se crearon dos grupos; uno trató el organigrama y otro la cuestión programática. Las comisiones negociadoras mostraron su interés en llegar al sábado con el acuerdo en la mano, pero eludieron ofrecer detalles de las negociaciones.

PSPV, Compromís y Podem reflejaron sintonía en los encuentros por separado del martes. Ayer trasladaron un mensaje público de acercamiento, pero el ambiente no denotaba la misma proximidad que el día anterior. Verònica Ruiz, de Compromís, contestó con evasivas cuando fue preguntada sobre si el pacto estaba lejos o cerca de certificarse. Ninguno de los portavoces que hablaron ante los medios mencionó la palabra sintonía y solo reiteraron su afán en llegar al acuerdo.

El Partido Socialista lleva la voz cantante del proceso por ser el ganador de las elecciones y mejorar sus resultados respecto a Compromís y Podem. Cuenta con 10 concejales frente a los tres de los valencianistas y los dos de la agrupación municipalista. En 2015, la diferencia entre el PSPV y Compromís fue de solo tres regidores y en dicho escenario estos últimos consiguieron importantes cuotas de poder a cambio de dar votar a favor de Amparo Marco como alcaldesa. Entonces, consiguieron la vicealcaldía y la portavocía. En esta ocasión, los socialistas marcan los tiempos. Los tres asumen que habrá pacto, cuyo nombre será diferente al del Grau, y que debe adecuar al número de concejales cosechados en los comicios. Y en este tema donde parece que estará la principal fricción.

Fuentes internas aseguran que ayer se habló del reparto de concejalías y que los socialistas han trasladado una primera propuesta que no contenta a valencianistas y Podem. Compromís afirma públicamente que primero quiere acordar el contenido programático y luego hablar de las delegaciones de cada concejal. Con la nueva representación surgida de las urnas podría perder la vicealcaldía o la portavocía.

Podem aspira a dirigir los departamentos de Transición Ecológica y Vivienda. Hoy habrá un segundo encuentro a tres bandas en la sede de la coalición valencianista.

El comunicado oficial consensuado por PSPV, Compromís Y podem subraya «los trabajos avanzan de forma satisfactoria y continuarán en los próximos días con el objetivo de alcanzar un acuerdo global».

Añade que se debatió la definición de un nuevo organigrama municipal en el que se redefinirán las áreas de gestión. «PSPV y Compromís han planteado propuestas bastante aproximadas, que deberán perfeccionarse en los próximos días». La confluencia expondrá también sus puntos de vista.