Queman un coche de la Guardia Civil a las puertas del cuartel de Almassora

Un encapuchado vierte líquido sobre el turismo camuflado y huye sin ser detenido

Vídeo: Queman un coche de la Guardia Civil a las puertas del cuartel de Almassora

Levante-EMV

Núria B. Bigné

La Guardia Civil investiga el incendio intencionado de uno de sus vehículos oficiales (el camuflado utilizado para las investigaciones) justo a las puertas del cuartel de Almassora. El suceso se produjo en la madrugada del lunes al martes, concretamente a las 0.15 horas, en la calle de la Purísima y fue necesario el desalojo preventivo de los vecinos del número 25 de la calle Jesús y María debido a la entrada de humo en el inmueble.

Al lugar se desplazaron de inmediato agentes de la Policía Local de Almassora y bomberos de la Diputación, procedentes del parque de Nules, así como guardias civiles. Los efectivos evacuaron a los vecinos de la citada vivienda colindante y ventilaron la misma hasta las 1.20 horas, momento en que los residentes pudieron volver a sus domicilios.

Hay imágenes de una cámara

El vehículo policial estaba estaba estacionado en la propia puerta del cuartel y, según ha podido saber Mediterráneo de fuentes solventes, en las imágenes que ya analiza la Benemérita se ve a una persona, encapuchada y vestida de negro que se acerca al turismo segundos antes de que empiece a ser pasto de las llamas. Al parecer, las grabaciones muestran cómo el susodicho vierte algo sobre el vehículo --quizás gasolina u otro tipo de acelerante-- y le prende fuego, marchándose después a la carrera. Aunque las cámaras graban esta acción, no se ha podido de momento determinar la identidad del autor del incendio.

Todo parece indicar que la persona en cuestión sabía lo que hacía, pues llevaba el rostro cubierto para no ser reconocido en las grabaciones. Podría tratarse de una venganza contra la Guardia Civil por alguna actuación policial, aunque el Cuerpo no se ha pronunciado a este respecto.

Las llamas devoraron el coche camuflado, sin llegar a causar daños en otros vehículos y sin dejar, por fortuna, daños personales.

Solo un guardia dentro del cuartel

Resulta llamativo que el investigado pudiera aproximarse al coche, prenderle fuego y lograr escapar. Todo ello, además, a las puertas del cuartel. Sin embargo, según ha podido confirmar también este diario, se da la circunstancia de que en el momento del siniestro solo había un guardia de servicio en el interior del cuartel de Almassora, por lo que su capacidad de actuación era un tanto reducida.