Las fuertes lluvias y tormentas registradas este último fin de semana en la provincia de Teruel provocaron que ayer por la mañana el río Turia se desbordara a su paso por el término municipal de Torrebaja, en la comarca del Rincón de Ademuz. La crecida del caudal llegó a alcanzar las partes traseras de algunas viviendas del casco urbano, sobre todo en el barrio de la Venta, aunque sus vecinos no pasaron por peligro alguno.

Al parecer, el incremento del caudal anegó varios campos y zonas de huerta colindantes con el casco urbano y habría afectado gravemente a los cultivos de maíz y de manzana esperiega de la zona, según informaron fuentes municipales. Además, el agua llegó hasta las inmediaciones de los barrios del Cantón y la Venta, donde el agua entró en las partes traseras de algunas casas. No obstante, según indicaron las mismas fuentes, no llegó a haber filtraciones en los hogares.

A lo largo de la mañana, además, había cierta incertidumbre entre los vecinos de Torrebaja ante la posibilidad de que nuevos chubascos incrementaran el nivel del río a lo largo del día y pudieran causar serias dificultades. Sin embargo, durante toda la jornada se mantuvo el buen tiempo, sin precipitación alguna, lo que dio cierta tranquilidad entre los vecinos y responsables municipales.

El concejal Óscar Pardo (PSOE) lamentó que se produjera esta situación, la cual atribuyó a la «desidia» que «durante años» ha mostrado la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) para limpiar el cauce. Así, denunció que el río Turia, a su paso por Torrebaja, «está lleno de broza e incluso basura», sin que la CHJ ponga remedio alguno.

En ese sentido, Pardo avanzó que el consistorio reclamará una reunión con la nueva dirección de la CHJ, recientemente nombrada por el Gobierno de Pedro Sánchez, para reclamar soluciones. Mientras tanto, tras esta última inundación, los vecinos de Torrebaja deberán lidiar durante los próximos días con los problemas propiciados por el agua estancada a la vera de su casco urbano -como por ejemplo son los mosquitos- y esperar a que una nueva lluvia torrencial dispare de nuevo el caudal del Turia.