El turismo rural se ha convertido desde hace unos años en uno de los mayores atractivos para el visitante que trata de alejarse de los núcleos urbanos.

Esto ha supuesto todo un salvavidas para las ciudades y municipios de interior, que han apostado por este tipo de servicio como revitalizador de sus economías.

La Hoya de Buñol es una de las comarcas del interior de la Comunitat Valenciana que mejores y más recursos y posibilidades tiene de cara a potenciar este tipo de turismo. Sus abundantes recursos y atractivos son un argumento más que suficiente para disponer de una mejor oferta turística.

Una de las principales justificaciones de esta situación es la carencia de empresas dedicadas a actividades de turismo activo, algo llemativo teniendo en cuenta los abundantes recursos naturales y zonas de montaña que atesoran la comarca.

La oferta de senderismo es también mejorable. Sus 9 rutas de pequeño recorrido (PR) son menos de las que cabría esperar dada la orografía comarcal. Los recorridos están repartidos entre casi todas las poblaciones -tan solo Cheste y Godelleta se quedan al margen-.

En cambio, La Hoya de Buñol-Chiva ocupa una posición destacable en el ámbito del turismo enológico. Son 8 las bodegas censadas según la Denominación Origen València y ocupa la cuarta posición en el ránking comarcal provincial. Todas las bodegas se concentran en Chiva y Cheste.

La comarca no cuenta con ningún balneario.

En cuanto a la oferta de alojamiento turístico, el indicador de plazas de alojamiento por cada 1.000 habitantes sitúa a la comarca por debajo del promedio provincial: 27,77 frente al 35,46 de la provincia.

La oferta de alojamiento turístico está liderada claramente por Chiva, la población de mayor tamaño (14.800 habitantes), que acumula un total de 464 plazas, el 41% del total de la comarca. Las poblaciones que siguen son Alborache (156 plazas) y Cheste (116 plazas).

La comarca destaca en las modalidades de alojamiento típicamente rurales. Cuenta con 17 casas rurales censadas, 10 de ellas en Yátova, y 2 albergues, ubicados en Alborache y Chiva.

Por su parte, la oferta hotelera destaca por sus 4 hostales, 5 pensiones y 4 hoteles, a los que se unen a la baja los 44 apartamentos de la comarca, que se concentran en más del 50% en Chiva.

Todos los municipios de la comarca disponen de plazas de alojamiento. El menor número corresponde a Macastre con 21 plazas.