M. V., Valencia

El Colegio Imperial de Huérfanos San Vicente Ferrer, sito en San Antonio de Benagéber, ha experimentado una transformación radical y espectacular. O al menos una parte: el almacén de material que, en apenas diez días, ha pasado de ser una construcción sin luz ni agua, a convertirse en una residencia de fin de semana y períodos estivales para algunos de los niños que, por sus especiales condiciones familiares, no podían pasar tantos días con sus parientes.

La cadena de televisión Antena 3 y la productora Zeppelin TV son los responsables de la metamorfosis, que en la noche de ayer se pudo contemplar, paso a paso, en el programa Esta casa era una ruina. Las dos firmas mediáticas conocieron la institución, el único orfanato que queda abierto en la Comunitat Valenciana y el más antiguo de Europa -fue fundado en 1410 por San Vicente Ferrer-, a través de Internet.

Tras saber del Colegio Imperial de Huérfanos, le propusieron protagonizar una de las entregas del programa. A cambio, reformarían de manera íntegra un recinto que la entidad usaba como almacén de material y que, de aceptar, podría convertirse en la "Casa de fin de semana". Y así ha sido.

A partir de ahora, la edificación se destinará a albergar durante los días festivos y las vacaciones a todos aquellos niños que, debido a las especiales condiciones de sus familias, apenas pueden salir del colegio. Para remodelar el viejo almacén, el programa necesitó diez durante los que trasladó a los menores a Madrid. Allí visitaron los estudios de Antena 3, conocieron a personajes como Matías Prats, cantantes como David Civera, y disfrutaron de un parque temático y del zoo, entre otras cosas.