El portavoz del PP en les Corts, Jorge Bellver, destacó ayer que el plan de pago a proveedores que el Gobierno puso en marcha en 2012 «supuso una inyección de más de 7.500 millones para la Comunitat Valenciana», y en esas deudas saldadas «se incluyeron facturas de 2011 y anteriores». «La mayor parte de los pagos se destinó a facturas pendientes en las áreas más sociales, como demuestra el hecho de que en la última fase del plan un 67% se destinó a pagos de las Consellerias de Sanidad, Educación y Bienestar Social», aseguró el síndic popular.

Bellver acusó a la oposición de «poner en duda cualquier decisión y hecho llevado a cabo por el Consell», y recordó que el proceso de adhesión al plan lo determina el Ministerio de Hacienda. f. a. valencia