Podemos y la patronal valenciana se reunieron ayer por primera vez desde la eclosión de la formación de Pablo Iglesias que las encuestas sitúan como pieza importante en la configuración de un futuro Gobierno. El encuentro, que fue muy cordial según explicaron los asistentes, evidenció que las dos partes apuestan por cambiar el modelo de financiación autonómica y por dar un impulso a las infraestructuras. En este sentido, el decálogo empresarial sobre obra pública fue compartido casi en su totalidad, aunque el secretario general de Podemos, Antonio Montiel, anunció que «priorizará» las redes de cercanías, las que vertebren el territorio como el eje Alicante-Alcoi o Dénia-Gandia.

El presidente de Cierval, José Vicente González, apostó por el diálogo con todas las fuerzas políticas y pidió a Podemos que la defensa de la financiación hay que hacerla en la Comunitat Valenciana, «pero sobre todo en Madrid», en alusión a las Elecciones Generales de noviembre donde el partido de Pablo Iglesias parte con una buena situación. González reconoció que donde no hubo acuerdo entre las partes fue en el modelo de cooperación público-privada, «aunque es importante seguir hablando y dialogando». «Para ser una primera ronda ha estado bien», sentenció. En la reunión también estuvo el presidente de la Confederación Empresarial Valenciana, Salvador Navarro

El candidato de Podemos manifestó que el decálogo de propuestas presentadas por los empresarios en la reunión «pone de manifiesto que ha habido cierto abandono por parte de las administraciones públicas a la hora de apoyar, dialogar y buscar puntos de consenso en una planificación estratégica en términos industriales, turísticos y de generación de riqueza» en la C. Valenciana.

Añadió la coincidencia de su formación con los empresarios sobre la necesidad de que «fluya el crédito» y se recupere «el músculo financiero valenciano», y criticó que el IVF «ha perdido relevancia y perfil por mala gestión».

Montiel censuró la «mala aplicación de principios básicos de seguridad jurídica como la morosidad pública y privada». «Queremos seguridad jurídica para los empresarios, pero también para las familias que firman una hipoteca», argumentó. El candidato defendió la necesidad de combatir la corrupción, «una lacra que ha devaluado las instituciones y ha llevado a una miseria moral y pérdida de credibilidad. Muchas empresas sufrieron una presión insoportable para concurrir en condiciones de igualdad».

«Vamos a salir juntos de esta crisis», dijo el secretario general de Podemos, y defendió que el modelo productivo valenciano está por encima de «visiones reduccionistas o trincheras».