Las tormentas volvieron ayer al interior de la Comunitat Valenciana para dejar acumulados de hasta 9,8 litros por metro cuadrado en Enguera que estuvieron acompañados de granizo en lugares como Navalón, La Torre (Utiel) o Campo Arcís (Requena).

En Buñol se medían 8,4 l/m2, el embalse de Benagéber 6,4 l/m2, 4,6 l/m2 en Requena y 4 litros en Siete Aguas.

No obstante, las tormentas no fueron tan intensas ni «organizadas» como en la jornada del domingo, cuando una «supercélula» barría el valle de Ayora y dejaba una fuerte granizada en Requena que afortunadamente no llegó a provocar daños al viñedo.

Según explicó el jefe del servicio de Climatología de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Valencia, José Ángel Núñez, se trata de un tipo de tormenta típico de zonas del interior y que suele producirse al final de las estaciones de primavera y verano.

Este fenómeno, frecuente en España en el este peninsular, deja en el radar una imagen muy reconocible y, a diferencia de las que se registran en Estados Unidos y que normalmente van acompañadas de tornados, en nuestro país son similares a una tormenta ordinaria.

Según ha descrito Núñez, la «supercélula» se produce cuando en la atmósfera hay un ambiente propicio para el ascenso del aire, que cambia de dirección e intensidad según va subiendo y causa la rotación que la caracteriza.

Estas tormentas tienden a formarse en condiciones de alta inestabilidad y con vientos fuertes a grandes alturas, y se trata de «la forma más organizada de tormenta», con un sistema más organizado de circulación interna.

Las lluvias y el granizo caído el pasado fin de semana no ha causado graves daños en el campo, salvo en algunas parcelas localizadas, según las principales organizaciones agrarias de la Comunitat Valenciana.

El granizo estuvo acompañado de agua y ello redujo su efecto perjudicial en los cultivos, aunque en algunas parcelas de la zona de Les Alcusses, en Moixent, la piedra, de poco tamaño, podría haber afectado a entre el 50 y el 60 por ciento de los frutales de albaricoque.

Fuentes de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA), el granizo caído en la zona de Requena estuvo muy localizado y afectó sobre todo al casco urbano, y «no hay constancia de grandes daños»