¿Por qué hay que ver el documental Frankenstein-04155?
Porque es un caso que nos toca a todos. Hablamos de algo tan común como coger un tren. Además de la similitud que existe con el caso del metro de Valencia. Todos los ciudadanos deben asistir y enterarse de la verdad.
Como superviviente del accidente ¿qué esperaba de la Administración que no ha obtenido?
Siempre he tenido una visión sobre la política y la administración un tanto escéptica. Una persona normal esperaría un poco de atención pero ha sido nula. Nos han recibido, pero todo ha sido una mentira detrás de otra. Por ejemplo, la ministra de Fomento, que nos dijo que estaría al lado de las víctimas y se ha visto que para nada. Ha sido una vejación detrás de otra. No nos han tenido en cuenta para nada. Sólo les ha interesado tener su foto en el lugar del accidente y hacer el paripé correspondiente. Nos han ninguneado.
¿Y de la investigación judicial?
En el documental se demuestra que la investigación judicial sólo ha servido para defender los intereses de las empresas del Estado. Y para gente de a pie como nosotros se nos hace difícil luchar contra ese tipo de maquinaria. Es David contra Goliat.
Su participación en el documental, pintando un «graffiti» y ese final es impactante. ¿Cómo surgió?
Se puso en contacto conmigo el director Aitor Rei porque sabe que pinto graffitis,una actividad de la que vivo desde hace dieciséis años, y se nos ocurrió hacerlo para darle una visión más artística y hacer un graffiti con el nombre del documental. Para mi es más fácil expresarme con la imagen que con las palabras. Y da una imagen más artística y cinematográfica. El final es impactante. Resume la idea de la tragedia. Tiene un acabado que refleja los sentimientos del impacto del accidente en las vidas humanas.
¿Os habéis sentido sólos socialmente, como les ocurrió a las víctimas del metro de Valencia?
Al ver el documental, la gente reacciona. En la marabunta de información que existe en este mundo globalizado hay cosas que pasan desapercibidas. La gente cuando se entera de lo que sucedió se sorprende mucho. Más de lo que yo pensaba. El documental es una gran herramienta de comunicación para expresar nuestra denuncia. Los grandes medios pueden dedicarle un par de minutos al accidente pero nuestro mensaje puede pasar desapercibido.
Insisten en denunciar a pesar de de que suponga reabrir heridas, como se les decía aquí a las víctimas del metro.
La herida nuestra no la va a cerrar nadie. Que se diga que las víctimas pretendan reabrir heridas... Si no utilizamos este tipo de medios, teniendo que luchar contra quien se intenta luchar, ¿ qué otra cosa nos queda? En Valencia tenemos el mayor ejemplo. Cómo un tipo de chapuzas ocasiona tantos muertos. Si no fuera por el ejemplo que la Asociación de víctimas del metro ha dado con su lucha... Si no hubiésemos tenido ese apoyo y ese estandarte en el que fijarnos habría sido diferente. Tenemos que agradecer parte de la imagen que nosotros tenemos a la Asociación de víctimas del metro.
¿Qué esperáis las víctimas del Alvia del nuevo Gobierno?
Tenemos el apoyo de Podemos, Ciudadanos, el BNG e Izquierda Unida. Desde varios ayuntamientos se ha solicitado que se cree una comisión de investigación. Ciudad real ha sido el primer ayuntamiento que ha pedido, por unanimidad de todos los partidos, al Gobierno central que cree una comisión de investigación.
¿Tener información y saber qué sucedió es el único consuelo que queda tras un accidente así?
Nosotros siempre hemos exigido por este orden: verdad, justicia y luego la reparación. No se puede tener una cosa si no hay otra. Pero las altas esferas, como el fiscal Antonio Roma, parece que sólo se preocupa del tema de la indemnización. «No se preocupe que usted va a cobrar», dice a las víctimas. Y lo demás les da igual. Creen que nos van a hacer callar con dinero.
¿Qué reparación esperan?
Conocer la verdad, que se haga justicia y que los responsables políticos y judiciales paguen. Así la carga se hace menos pesada. El tema económico es secundario. Después de lo que hemos vivido el dinero nos da igual. No me va a devolver lo que yo he perdido. Nadie me va a devolver los años que no voy a poder pasar con mi pareja o con mi padre. Eso no hay quien lo pague. Pero ver que los responsables pagan cicatriza la herida un poco más. Y no es venganza. Simplemente debe ser así. Si has hecho algo mal debes acatar las consecuencias, como le sucede a cualquier gente de a pie. La gente que no ha sabido gestionar, hacer su trabajo o que permitió que esta chapuza se llevara a cabo, que acarreen las consecuencias.
También temen que la corrupción destapada en el AVE a Barcelona se reprodujera en Galicia y afectara a la seguridad.
Desde la Plataforma nos preguntamos si la corrupción mata. Las empresas investigadas en Barcelona y en la Operación Púnica también participaron en la línea Ourense-Santiago donde se produjo el accidente. Y eso te hace pensar si estos fallos de seguridad se produjeron por la corrupción. Personalmente pienso que sí. Que el accidente es un ejemplo más de todo lo que está ocurriendo en este país. Se nos trata como si fuéramos un caso aislado, pero es todo lo contrario. Es una consecuencia de lo que vemos en este país hace años. Sólo que en este caso, como en Valencia, ha habido sangre de por medio. Todo este tipo de chapuzas han llevado a un final: en nuestro caso 81 muertos y 144 heridos. Ese es el recuento de estas acciones de las administraciones.
