La Campaña por el cierre de los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIEs NO) denunció ayer que, desde abril, se han internado en el CIE de Zapadores de Valencia a al menos a cinco posibles menores de edad argelinos trasladados desde Algeciras tras ser interceptados en el mar. Según un comunicado de CIEs NO, todos esos menores manifestaron que llevaban consigo su documentación y que en algún momento del proceso la habían perdido, si bien algunos ya fueron deportados el pasado 17 de mayo, y los demás están siendo representados por distintas letradas.
Las mismas fuentes señalaron que ayer se ha presentado a Fiscalía de menores la documentación original de los certificados de nacimiento de al menos dos de ellos. No obstante, dada la premura ante una posible expulsión, no se ha podido presentar con una traducción legalizada.
También se ha presentado previamente al juzgado de vigilancia del CIE y al que ordenó el internamiento, así como a la Fiscalía de Menores de Valencia y de Almería, un escrito sobre el proceso de detección de edad. A raíz de ello, aseguran, se han abierto diligencias procesales en Fiscalía de Menores respecto al posible incumplimiento del protocolo marco de menores no acompañados.
Ana Fornés, portavoz de CIEs NO, declaró que es «especialmente preocupante» que se «prive de libertad» a menores de edad en el CIE. En su opinión, ni la actual presencia de Cruz Roja en Zapadores, ni la visita institucional del ayuntamiento que encabezó el alcalde de Valencia, Joan Ribó, aseguran un «cumplimiento de los derechos humanos, ni la protección de víctimas vulnerables», sino que, «definitivamente, la única opción respecto a los CIE es su cierre inmediato y sin condiciones».
Por ello, CIEs NO solicita de manera urgente a Delegación de Gobierno que se suspenda cautelarmente la ejecución de la expulsión y que prevalezca la ley del Menor, posibilitando su salida del CIE de Zapadores hasta que se hayan realizado las pruebas pertinentes.
