La Abogacía de la Generalitat ha presentado hoy ante la fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana la denuncia por el acoso intimidatorio de un grupo de ultras a la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, en su domicilio privado en la noche del miércoles, mientras estaba sola con sus hijos pequeños en el interior. Finalmente, la Generalitat es la impulsora del proceso penal ya que el Consell entiende que ese ataque a Oltra se produce en su condición de vicepresidenta y no como particular.

La Abogacía considera que esta acción le produjo una "evidente intimidación y desazón" ypuede ser constitutiva de un delito de acoso u otros como odio o desórdenes públicos.

Así consta en el texto de la denuncia, en el que la Abogacía relata los hechos ocurridos sobre las 21.30 horas del miércoles frente a la casa de Oltra.

El presidente de la Generalitat. Ximo Puig, avanzó ayer la presentación de la denuncia tras reunirse a primera hora con los letrados y con el director general de la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias, José María Ángel. En principio, la denuncia será por delito de odio, coacciones y desórdenes públicos.

Además, el presidente habló tanto con el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ayer por la mañana, como con el delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, en la noche del miércoles, para trasladarles su preocupación tras el escrache sufrido por la vicepresidenta por parte de un grupo de extrema derecha, personas que «no representan a nadie» y que forman parte de movimientos «absolutamente residuales» en la Comunitat.

«Yo creo que [el ministro] es consciente de que tienen que tomar medidas más contundentes respecto a algunos grupos; en cualquier caso no quiero en absoluto polemizar respecto a esta cuestión, creo que el ministro es consciente, está haciendo su trabajo», resaltó Puig para mostrar su confianza en las fuerzas de seguridad, e insistió en que «la policía está haciendo su trabajo y lo debe intensificar».

En cuanto a la denuncia que se interpondrá esta mañana ante la Fiscalía, el president explicó que obedece a que no pueden «dejar pasar lo que está significando para algunos esa especie de vuelta al pasado más negro» de la historia. «Son absolutamente minoritarios, no representan a nadie y no vamos a dejar tampoco que los focos se pongan en ellos, que es lo que quieren», zanjó.

A la espera de las denuncias

La Guardia Civil no ha abierto aún formalmente ninguna investigación, a la espera de la denuncia que se interpondrá hoy en la Fiscalía, según ha podido saber Levante-EMV de fuentes de toda solvencia, que remarcaron que, una vez presentado ese escrito de imputaciones, se abrirán las diligencias.

Sin embargo, agentes del servicio de Información de la Comandancia de València y del puesto de Riba-roja, de donde llegaron las patrullas que acudieron a casa de la vicepresidenta poco después del ataque, ya han elaborado sendos informes sobre lo ocurrido y han apuntado las primeras identificaciones, entre ellas la del líder de España 2000, el más visible de todos los autores del escrache en el vídeo que ellos mismo grabaron y emitieron en directo a través de la página de Facebook de la formación política de extrema derecha. Además, y dado que grabaron sus propias matrículas, la Guardia Civil ya tiene constancia de la identidad de los propietarios de esos coches.