Los partidos que forman el Consell no se resienten tras dos años y medio de gobierno. Es una de las conclusiones que se puede extraer del primer barómetro del ejecutivo del Botánic si se comparan sus resultados con los anteriores. Tanto PSPV como Compromís crecen en afinidad política. Peor parado sale el tercer socio, que no forma parte del ejecutivo: Podemos cae a la mitad en cuanto a simpatía entre los ciudadanos con respecto a abril de 2015, fecha del estudio anterior.

Entonces, la Comunitat Valenciana estaba a las puertas de las elecciones autonómicas que supusieron la salida del PP de la Generalitat después de 20 años. El PSPV ya era el partido que la mayoría consideraba «más cercano a sus ideas», si bien por un margen muy reducido. Ahora, el partido del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, avanza en 2,6 puntos y supera la barrera de los 20 en simpatía, algo que ningún partido conseguía desde 2013.

Compromís, la otra parte del bipartito, también progresa con respecto al estudio anterior, aunque la cifra no es alta. En 2015, le daba un 8,7 de afinidad y en las urnas obtuvo un mes después el 18 % de los votos.

El PP avanza un punto y se mantiene como segunda fuerza en simpatía. El porcentaje queda lejos del 40 % que obtenía en 2011. Ciudadanos también crece, pero lejos de las proporciones que tras el conflicto catalán han dado encuestas para toda españa. Las 2.016 entrevistas personales para el sondeo se realizaron entre el 27 de noviembre y el 20 de diciembre pasados.

Con todo, el barómetro no incluye datos de intención de voto. Recoge solo afinidad política. Está realizado «sin cocina», señaló ayer durante la presentación el director general de Análisis de la Generalitat, Julián López Milla. Con todas las cautelas, lo significativo sería la progresión de los socios de gobierno tras pasar el ecuador del mandato.

Compromís continúa por otra parte como el partido que mejor defiende los intereses de la C. Valenciana, aunque el PSPV se acerca. El PP, que perdió la hegemonía en esta cuestión, en 2014, según la serie histórica, mantiene su caída: rozaba el 45 % en 2011, ahora está en el 12,5.

Un dato llamativo es que solo el 17,8 % sabe que PSPV y Compromís componen el Consell desde 2015. Incluso un 4,7 % cree que gobierna el PP: dado que el universo de la muestra es mayores de 18 años significa que algo más de 190.000 valencianos pensarían que los populares mandan aún.

Puig subrayó ayer que es la primera vez desde 2009 que la valoración de la gestión del Consell es positiva. El 27,7 % opina que es buena o muy buena, el 47,9 % la considera regular y el 19,6 % que cree que es mala o muy mala. En 2015, el 54,7 % pensaba esto último.