La Educación Secundaria Obligatoria (ESO) en la Comunitat Valenciana camina hacia atrás como los cangrejos. Las estadísticas de los resultados académicos del curso 2015-16 que acaba de publicar el Ministerio de Educación muestran que la cifra del alumnado valenciano propuesto para el título de graduado en ESO en dicho ejercicio suponía el 73 % de la población de 15 años, la edad teórica de comienzo del último curso de esta etapa obligatoria. Este índice es 1,7 puntos peor que el 74,7 % de éxito en ESO que registró la Comunitat en el curso 1999-00, año en el que se graduó la primera promoción que completó los cuatro cursos de esta etapa introducida por la Ley Orgánica General del Sistema Educativo (Logse) socialista de 1990.
Este empeoramiento solo se produce en la C. Valenciana. En las 17 promociones de ESO que se han sucedido entre 2000 y 2016 todas las autonomías, con mayor o menor fortuna, han ido mejorando sus tasas brutas de graduación en la enseñanza secundaria obligatoria. En este avance destacan sobre todo Extremadura, que ha incrementado este indicador de éxito académico en 14,3 puntos, Murcia con 13,5 puntos, Canarias con 11,1 y Castilla-La Mancha y Cantabria con 10 puntos cada una.
Todos los territorios menos el valenciano avanzan, elevando la tasa bruta de graduación en ESO española en casi seis puntos al pasar del 73,4 % al 79,3 %. El retroceso de la Comunitat hace que caiga hasta el vagón de cola con un porcentaje del 73 % de graduados en ESO sobre el total de población en la edad teórica de inicio del último curso de esta etapa. Únicamente Balears, con una tasa bruta del 70 %, tiene un indicador más bajo.
Bajo el Consell del PP
El curso 2015-16 es el primero del Consell de Botànic, aunque el tándem Compromís-PSPV apenas influye en la planificación del mismo al asumir el timón de la Conselleria de Educación el 30 de junio de 2015, poco más de un mes hábil antes del inicio de las clases al estar agosto por medio.
Son múltiples causas las que explican el escaso éxito de la ESO valenciana comparada con el resto de autonomías. La primera es la elevada tasa de abandono escolar prematuro. En 2003 casi uno de cada tres jóvenes valencianos -el 32,7 % de la población de 18 a 24 años- dejaba las aulas sin completar la Educación Secundaria Obligatoria (ESO). Los días de vino y rosas del la burbuja inmobiliaria reclamaban a espuertas mano de obra sin cualificar para atender la expansión de la construcción y del sector servicios. La reducción del abandono escolar se aceleró en 2008 tras el estallido de la crisis.
También influyen los recortes en educación. La Generalitat del PP aplicó a rajatabla el Real Decreto-ley 14/2012, de 20 de abril, de medidas urgentes de racionalización del gasto público en el ámbito educativo, y en el curso 2012-13 incrementó de golpe en todas las Enseñanzas de Régimen General las ratios de alumnos por aula. Así, se pasó de un máximo de 25 a 30 niños en Infantil y Primaria, de 30 a 36 en ESO y FP, y de 35 a 42 en Bachillerato. Un factor que tanto PSPV como Compromís desde la oposición vincularon, al igual que los sindicatos docentes, con el fracaso escolar y la pérdida de 4.000 docentes en la enseñanza pública.
Otro factor que subyace es el gasto educativo. Así, por ejemplo, el País Vasco, con una tasa bruta de graduación en ESO del 86,8 % (la segunda mejor de España) invierte en educación el doble por alumno que la Comunitat.
Recortes y nivel educativo
Pese a la infrafinanciación, el departamento que dirige el conseller Vicent Marzà asegura que la inversión se ha aumentado de 4.995 euros por alumno en el curso 2014-15 a los 5.635 euros por estudiante en el 2016-17, lo que supone un 12 % más que en el último año completo de gestión popular. Otro factor estructural es el nivel de formación de los padres, sobre todo de la madre, al existir una correlación directa entre este indicador y los resultados de los hijos en el sistema educativo. El nivel educativo del 43,7 % de la población valenciana de entre 25 y 64 años no va más allá de los estudios obligatorios. Este porcentaje es el octavo peor de España.
