Más de 5.000 arquitectos tienen oportunidad de elegir mañana a un nuevo decano para el colegio autonómico en las mesas habilitadas en Alicante, Alcoi, Dénia, Torrevieja, Elche, Elda, Benidorm, Castelló, València, Gandia y Xàtiva. Las elecciones llegan en un momento muy delicado, tanto para los profesionales, como para los colegios que les han representado históricamente y que ahora se ven privados de muchas de sus competencias tradicionales. Tres arquitectos, varones, compiten para liderar este proceso en la Comunitat Valenciana.
Alfonso Díaz Segura: "Si mantenemos un colegio solo para visados nos equivocamos"
Arquitecto desde 2001, es adjunto al vicerrectorado de Relaciones Internacionales de la universidad CEU-Herrera Oria. Diseña edificios y publica en revistas especializadas.
Una mesa para redefinir el futuro del Colegio, unificar criterios con los colegios territoriales, aumentar la interlocución con la administración y reforzar el prestigio de la profesión son objetivos de su candidatura.
«Tenemos que anticiparnos», insiste el candidato, obsesionado con ir «un paso por delante» de los profundos cambios que ya se ven en los colegios profesionales y se intuyen en la profesión.
P ¿Qué le lleva a presentar su candidatura?
R Hay muchos retos, tanto para la profesión como para el Colegio. El contexto laboral ha cambiado mucho en los últimos diez años y tenemos que incrementar nuestra presencia en las instituciones para defender al colectivo y para evitar que se consoliden las licitaciones en las que el item principal es la baja económica. Aspiramos a que los ciudadanos tomen conciencia de la importancia que los arquitectos tienen en la sociedad.
P Algunos compañeros son muy críticos con el decanato actual...
R Yo critico algunas actitudes pero hacer una enmienda a la totalidad me parece injusto. Su política de comunicación es manifiestamente mejorable y no han sabido trasladar a los arquitectos lo que estaban haciendo y por qué. Han sido valientes proponiendo un proceso abierto y participativo para cambiar el modelo colegial, que es una reforma inaplazable, pero luego han cerrado el proceso en falso dejándose llevar por la precipitación.
P ¿Cómo ha golpeado la crisis en el sector?
R Muchos compañeros han emigrado. Otros han sido capaces de extender su labor a otros ámbitos que no son solo el de la edificación: diseño gráfico, comunicación, gestión de equipos, branding... Siempre han estado ahí aunque parece que solo construíamos. Las personas que me acompañan en la candidatura representan muy bien esas vertientes.
P ¿Sus propuestas de futuro?
R Necesitamos repensar cual es la misión del colegio. Si lo mantenemos solo para visar cada vez menos proyectos nos estamos equivocando. Crearemos una mesa para redefinir ese futuro de la institución y de la profesión con todos los colegios territoriales, canalizaremos la formación de los arquitectos, etc. Antes que obligatorio pertenecer al colegio debe ser atractivo para todos los profesionales.
Luis Sendra Mengual: "El arquitecto ha sabido adaptarse porque tiene una formación amplia"
Arquitecto en ejercicio. Presidió el Colegio Territorial de Valencia entre 2008 y 2014 y desde 1988 es profesor asociado en la Universidad Politécnica de Valencia.
Dignificar los honorarios, llevar la formación reglada a todos los arquitectos, hacer que la sociedad vuelva a valorar a estos profesionales y recuperar la «unidad» del colectivo son parte de sus objetivos.
«El arquitecto ha sabido readaptarse gracias a que tiene una formación muy amplia», asegura Luis Sendra, que reivindica la aportación de los profesionales y el servicio que prestan a la sociedad valenciana.
P Usted ya sabe qué es ser decano y sin embargo insiste. ¿Alguna razón especial?
R Fui decano del colegio territorial de Valencia en una época difícil de decisiones duras, pero creo que se hizo una buena gestión y muchos compañeros quieren que traslademos esa experiencia al ámbito territorial y también como representantes de los arquitectos en el Consejo Territorial, que es donde se deciden grandes cuestiones que nos afectan, como la próxima ley de Arquitectura.
P ¿Sus primeras medidas?
R Acabar con la división. Coser lo que se ha roto y recuperar la unidad entre el colegio de la comunidad y los territoriales. Proponemos una reforma de estatutos, pero no deprisa y a última hora como se ha querido hacer, sino con horizonte en 2020 y con consensos.
P ¿Hay vida más allá del visado?
R Los arquitectos han demostrado que saben adaptarse a las nuevas circunstancias. Lo han hecho gracias a su amplia formación. Y sí, hay mucha vida, aunque el visado no va a desaparecer: hay razones de seguridad que justifican su permanencia. Queremos avanzar hacia el visado unificado y abrir nuevos campos de actuación. Podemos, por ejemplo, crear equipos que supervisen proyectos en colaboración con las administraciones. Agilizaríamos muchísimo los proyectos y los trámites de licencias.
P ¿Sus propuestas de futuro?
R Mejorar la imagen social del arquitecto, poner en contacto a los senior y los junior; reforzar la formación y llevarla a todos los rincones; defender activamente a la profesión frente a la competencia desleal, establecer honorarios dignos... Hay mucho por hacer y nuestra candidatura propone avanzar sin dividir.
Salvador Lara Ortega: "El colegio debe ser la casa de todos los arquitectos"
Arquitecto en ejercicio desde 1979 y Doctor en Arquitectura en la UPV. Miembro asesor de Fórum -Unesco 1997-2010. Tiene también la Medalla de Honor de la Universitat de Valencia.
Asegura que su candidatura es una «tercera vía» entre quienes mantienen un visión «más conservadora» de lo que debe ser el colegio y otra «más arriesgada». Lo suyo, dice, es un cambio sereno.
Asegura que todo arquitecto es un emprendedor nato, alguien que puede hacer un proyecto con unos pocos elementos y en todo aquello que «roce» la arquitectura. Gracias a esa capacidad, muchos han superado la crisis.
P ¿De todas las posibles razones para optar a presidir el colegio qué o quién le dio el último empujón?
R Para nosotros ha sido la preocupación por el gran colectivo de arquitectos jóvenes que termina la carrera y que están desconcertados. Necesita orientar su carrera profesional y no sabe qué hacer. Yo creo que el colegio puede ayudarles.
P Pero el colegio son, mayoritariamente, los que trabajan ¿no?
R Por supuesto. Tienen toda nuestra atención y llegamos para defender al arquitecto en el ejercicio de su profesión, que por cierto es mi caso. Llevo 40 años colegiado pero también tengo una larga trayectoria como docente en la universidad y creo que tengo que estar de su lado.
P ¿Su primera medida si es elegido?
R Negociar un nuevo protocolo con la Administración para los concursos de arquitectura. Queremos que ganen los mejores proyectos, aquellos que prestan un servicio mejor a la sociedad, que la hace sentirse cómoda. El mejor proyecto nunca puede ser el más barato. La nueva ley de contratación del sector público reconoce esa función social a la arquitectura. Es una responsabilidad que queremos asumir pero pedimos unas mínimas condiciones para ejercer nuestro trabajo con dignidad.
P ¿Un colegio sin visados?
R Debemos acoger a todas las formas de ejercer la profesión. El colegio no puede ser solo el lugar donde se visan proyectos, sino el lugar, la casa, de todos los arquitectos.
P ¿Realmente hay tanta división en el colegio?
R Ha habido disputas internas y conflictos de intereses que han «distraído» al Colegio de sus funciones. Queremos cambiar cosas pero de una forma serena y contando con todos ; ese es nuestro lema: «Todos somos COACV».
