El juzgado de Instrucción número 4 de Xàtiva llamará a declarar en los próximos días a los monitores que estaban con el grupo de jóvenes con síndrome de Down el pasado sábado, cuando desapareció uno de ellos, Sergio Requena, de 25 años, que fue hallado muerto al día siguiente, el domingo, a ocho kilómetros del albergue El Teularet donde se alojaba el grupo.

La jueza citará tanto a los monitores del Teularet, que tenían la responsabilidad de que las actividades al aire libre se realizaran de manera segura, como a los cuidadores de Asindown, organizadora del viaje de fin de curso de los chicos, y que tenían el deber de custodia del grupo.

Las citaciones serán emitidas a partir de hoy, ya que es precisamente esta mañana cuando la instructora recibirá el atestado levantado por el equipo de Policía Judicial de Xàtiva, que ha tomado declaración a los responsables del Teularet y de Asindown, así como a varios de los monitores que estuvieron esa tarde en compañía de Sergio y de los demás jóvenes.

Tal como ha venido informando Levante-EMV, un grupo de 60 chicos y chicas con síndrome de Down partieron el pasado viernes en dos autobuses desde València para celebrar el fin de curso durante el fin de semana en el albergue el Teularet de Enguera. Entre otras actividades, estaba previsto que el sábado por la tarde recorriesen un circuito que disponía, entre otras disciplinas, de tirolina y rocódromo.

Un empleado del Teularet era el responsable de colocarles a cada uno de ellos un arnés y un casco para realizar el descenso de tirolina en grupos de cinco personas. Este joven declaró ante la Guardia Civil que su responsabilidad está centrada en que cada persona lleve correctamente colocados todos los elementos de seguridad y de comprobar que el descenso se realiza con todas las garantías, y que es labor de los monitores de Asindown controlar que estén todos los miembros de su grupo y de acompañarles y garantizar su custodia.

A medida que iban saliendo de la tirolina debían dirigirse hacia la siguiente actividad, el rocódromo, ubicado a corta distancia, al final de una senda con una curva a la derecha sin, al parecer, señalización. Todo apunta a que fue en esa curva donde Sergio, una vez terminada la tirolina, se habría despistado y continuado recto.

Nadie se percató hasta las ocho

Las versiones del monitor del Teularet y de la cuidadora de Asindown que estaba al pie de la tirolina son, de momento, contradictorias. Algunos de los chicos incluso han llegado a contar a sus familias que preguntaron por Sergio en ese momento.

Precisamente por esa razón será fundamental que la jueza tome declaración a todos los que estuvieron presentes y pueden aportar algún dato que dirima si hubo negligencias que condujeron a la muerte de Sergio.

Otro de los puntos oscuros es por qué nadie advirtió antes la ausencia del chico y por qué no se alertó a Emergencias hasta después de las 22.00 horas.

Hay tres momentos clave que la Guardia Civil ha podido establecer. Sergio desaparece antes de las seis de la tarde -al parecer, incluso existen vídeos de las actividades que los agentes aportarán al juzgado-. Sin embargo, la ausencia del chico no es detectada hasta las 20.00 horas, cuando se sirve la cena y Sergio no se presenta a la mesa.

Al darse cuenta de que nadie lo había visto desde la tirolina, iniciaron la búsqueda por sus medios y no fue hasta pasadas las 22.00 horas cuando llamaron por primera vez a Emergencias dando cuenta de la desaparición de Sergio, lo que puso en marcha el dispositivo de búsqueda.

El cuerpo sin vida del chico fue encontrado 24 horas después, el domingo por la tarde, en una zona de monte muy escarpada. La autopsia determinó que falleció por un infarto, posiblemente causado por la suma de calor, agotamiento físico, falta de agua y pánico al sentirse solo y desorientado.