Pedro Alcorisa, en noviembre de 2009, junto a su hermana Pilar, en el momento en que descubrió gracias al Grupo por la Recuperación de la Memoria Histórica el lugar donde yacían los restos de su padre, Teófilo Alcorisa, torturado hasta la muerte en el cuartel de la Guardia Civil de Arrancapins. Fue enterrado el 24 de abril de 1947 en una fosa común del Cementerio General de València pero su familia no lo supo hasta 20 años después. Aún tardaría 39 años más en localizar la tumba.