La Generalitat activa la maquinaria para ampliar su plantilla. La conselleria de Justicia ejecutará las ofertas de empleo público de 2017 y 2018 con la convocatoria de 4.000 puestos de trabajo, lo que pondrá en marcha cien procesos selectivos. Así lo anunció ayer la consellera Gabriela Bravo durante su comparecencia en la comisión de presupuestos de las Corts para explicar las cuentas de su área.

En la Oferta Pública de Empleo de 2017 están ofertados 2.008 puestos, mientras que la OPE de 2018 será negociada en las próximas semanas y se espera que ronde el mismo número de plazas, superando así las 4.000.

A la comparecencia de Bravo le siguió la de la consellera de Sanidad, Ana Barceló, que también proporcionó información sobre la situación laboral del personal de su cartera. Así, anunció que está previsto ofertar 5.400 plazas de empleo público en Sanidad correspondientes a 2018.

La consellera recordó que en estos tres años de legislatura se han convocado las oposiciones de 2014, 2015 y 2016 de manera conjunta, con una oferta de 3.608 plazas, a las que se añaden las 6.790 plazas publicadas en 2017.

Bravo aseguró que la convocatoria de más de 100 oposiciones se pretende rebajar la tasa de temporalidad en la administración valenciana. Para hacerlo posible, la dirección general de Función Pública contará con 5,6 millones de euros y 600.000 euros para ejecutar los procesos selectivos.

La consellera afirmó estar «satisfecha» con unas cuentas que en este ejercicio contarán con 364,6 millones de euros, un 15% más que el año anterior. La justicia gratuita se llevará 45 millones para abogados y procuradores en turno de oficio, 20 para la modernización tecnológica de la Justicia y 30 millones para el Plan de infraestructuras judiciales.

Sin embargo, la diputada popular Maria José Sansegundo lamentó que la cartera de Bravo sea «la maría del Botànic» porque no ocupa «el lugar que merece». Para el PP se evidencia que no es una prioridad y reclamó dejar a un lado «los rifirrafes» dentro del Consell en violencia machista.

Para el diputado de Cs Toni Subiela, más que un plan de inversiones la consellera presentó «un plan de hipotecas» y señaló que «no ha mejorado mucho» desde el gobierno del PP.