El delegado de Compromís en Bruselas, Jordi Sebastià, que fue eurodiputado la primera parte de la legislatura y optará de nuevo al escaño en Bruselas en las elecciones de mayo de 2019 participó ayer en dos visitas a las cárceles de Lledoners y Puig de les Basses donde se entrevistó con el exvicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras;

Sebastià defiende, igual que los representantes de la delegación, la necesidad de que el juicio a los líderes independentistas previsto para enero se celebre con presencia de observadores internacionales porque tienen poca confianza en que concurran las garantías suficientes.

El también miembro de la ejecutiva de Compromís asegura que su intención es dar apoyo a los «presos políticos» para los que reclama su libertad y que se retiren todos los cargos porque están en juego la democracia y los derechos fundamentales. Sebastià ya participó a finales del pasado año en una manifestación en Bruselas en apoyo a los presos y exiliados catalanes.

El dirigente de Compromís considera «delirantes» las peticiones de la fiscalía del Supremo que solicita penas de 25 años para el líder de ERC. Tras la visita, Sebastià aseguró que los presos se mantienen «firmes y fuertes en la defensa de sus ideas por una vía siempre democrática y pacífica» y añadió que lo que está en juego es una cuestión de derechos fundamentales y de democracia y sostiene que es necesario que se conozca que los encarcelados son víctimas de un proceso «con falta de garantías».

«Es una injusticia absoluta tener a unas personas en prisión preventiva para castigarlos y apartarlos de sus derechos como miembros del parlamento de Cataluña», añade Sebastiá.

Entre los miembros de la delegación estaba también la castellonense Marina Albiol, de EU. Miembros de la delegación han asegurado que España se acerca a Turquía con la causa contra el soberanismo y que la petición de penas por un referéndum pacífico no pasaría en otro país europeo.