Las Corts Valencianes se ha decidido finalmente a cambiar los 124 escaños del hemiciclo después de casi un año de tramitación. La empresa adjudicataria ultima ya la construcción del centenar largo de butacas que probablemente se instalen en verano aprovechando el cese de actividad de la cámara, que quedó constituida el pasado jueves.
La butaca elegida no es la que más gustaba de las ofertadas, pero sí la que ofrece más prestaciones y sobre todo garantías ya que se podrán cambiar durante diez años. Cuando se inició el proceso, las Corts estaba dispuesta a gastarse unos dos mil euros por escaño, aunque el precio se ha rebajado.
El valor de cada butaca se sitúa en torno a los 1.500 euros ya que la adjudicación se ha realizado, según el portal de transparencia de las Corts, por 194.834 euros IVA incluido frente a los 260.150 euros que señalaba el presupuesto base de licitación. A principios de legislatura se llegó a poner sobre la mesa un precio por unidad de 2.653 euros IVA incluido, lo que suponía un total de 329.037 euros, proyecto que finalmente se paralizó. Hace una década también se produjo un intento similar que tampoco prosperó.
Durante la pasada legislatura, la iniciativa también se fue retrasando, pero en el tramo final los grupos representados en la Mesa ya no pusieron pegas a que se produjera el cambio de sillones. También el presidente de las Corts, Enric Morera, consideraba que era un buen momento para hacerlo.
La renovación se produce 29 años después de la instalación de los actuales escaños, que fueron adquiridos en julio de 1990 por un coste de 34 millones de pesetas de la época, 208.000 euros.
El informe técnico que avaló el cambio del mobiliario recogía la necesidad de que se hiciera con «urgencia» ya que el estado de los asientos es «pésimo». Incluso muchos visitantes de las Corts se sorprenden al entrar en el hemiciclo y no son pocos los que hacen notar el mal estado de las butacas, por lo que se considera que el espacio de representación de la soberanía popular da una mala imagen. Por el uso y la antigüedad del tapizado, los sillones presentan rozaduras, grietas y roturas, los apoyabrazos están deteriorados, se traban con la mesa y los mecanismos de muelles y movimiento no funcionan correctamente en muchos casos.
Escaños rotos y deteriorados
Al final de la pasada legislatura al menos dos escaños se rompieron y otros dieron problemas ya que se salen de las guías con asiduidad. Ahora, entre las prestaciones de los nuevos escaños se recoge que el sillón quede fijado al suelo como aparece en la imagen de la derecha, pero que tenga posibilidad de giro de 360 grados y que pueda desplazarse en horizontal. Además permite que retorne a la posición inicial de forma automática si el diputado se levanta.
Se instalarán 99 para diputados, siete para Mesa y letrados, los reservados al Consell, de color azul, y varios más de reserva.
