Uno de los puntos de fricción de los últimos días dentro de la negociación del segundo escalón de la Generalitat ha estado en la vicepresidencia segunda, la que dirige por primera vez Podemos con Rubén Martínez Dalmau al frente y que tiene además las competencias de Vivienda y Arquitectura Bioclimática. Finalmente, el tripartito ha decidido que el departamento del tercer socio funcione bajo la fórmula del mestizaje, de la que se vuelven a quedar fuera Presidencia, cuyos nombramientos se reserva en exclusiva Ximo Puig, y la vicepresidencia, que hará lo propio en la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas con Mónica Oltra al frente. Así, la conselleria de Vivienda tendrá representación del PSPV. Mientras, Dalmau no tendrá propiamente una secretaría autonómica adscrita a la vicepresidencia como sí tienen la de Oltra o Puig.
En cambio, sí dispondrá de una dirección general adscrita a la vicepresidencia segunda, por lo que de alguna forma se le da un trato especial aunque se le somete a la fórmula del mestizaje, la que supone nombrar cargos de diferentes formaciones para un mismo departamento y que en la anterior legislatura funcionó razonablemente bien aunque con algunos roces.
Mientras, Dalmau presentó ayer en el registro de las Corts su escrito de renuncia a su acta de diputado tras su nombramiento como vicepresidente.
Unides Podem tendrá tres representantes en el segundo escalón del Consell, uno en la Conselleria de Vivienda, otra en la de Justicia, que posiblemente sea Fabiola Meco aunque aún no ha dado la respuesta, y un tercero en Transparencia, Ignacio Blanco (EU).
