Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El 'procés' modera a Compromís

La coalición reacciona con una cautela que contrasta con el nacionalismo balear que protesta contra la sentencia y planta al Parlament

El 'procés' modera a Compromís

Dos estrategias políticas se han hecho fuertes esta semana en el panorama político valenciano. La primera, la del reforzamiento de la ofensiva de la derecha para vincular a la izquierda (especialmente a Compromís) con el independentismo a través de su conexión con entidades que simpatizan con el catalanismo aprovechando las manifestaciones contra la sentencia del «procés» convocadas por Acció Cultural en diferentes puntos de la Comunitat Valenciana.

Y una segunda, la moderación con la que Compromís ha reaccionado ante la sentencia contra los líderes secesionistas, en la línea de prudencia que la coalición mantiene sobre Cataluña desde que gobierna en las principales instituciones valencianas.

Esa discreción de Compromís y especialmente la del partido nacionalista que lo sustenta, el Bloc, que ha guardado un clamoroso silencio durante la semana que incluso le ha generado críticas internas a la actual dirección, se ve mejor en contraposición a cómo ha reaccionado, por ejemplo, el nacionalismo en las Islas Baleares.

La comparación es pertinente porque si hay dos territorios que son especialmente sensibles a los movimientos políticos que se producen en Cataluña esos son Baleares y la Comunitat Valenciana.

El alter ego de Compromís en las islas se llama Més, una coalición entre el nacionalismo y el ecologismo, que curiosamente tiene la misma denominación que ha adoptado la coalición valenciana desde que se hizo pública su alianza con Más Madrid, ahora Más País, el partido con el que íñigo Errejón debuta en la arena política española. Més (Més Mallorca) es casi un espejo de Compromís en Baleares. Ambos concurrieron juntos a las europeas y la coalición valenciana intentó sumar a la formación balear hace unas semanas a la causa de Errejón, aunque finalmente los nacionalistas baleares han preferido irse con Esquerra Republicana en una coalición que se llama Més Esquerra. ¿Pero qué ha hecho el «otro yo» de Compromís en Baleares?

Los diputados de Més, un partido clave en el gobierno de Baleares, igual que Compromís en la Comunitat Valenciana, llegaron a abandonar el pleno del Parlament balear en señal de protesta por la condena del Supremo a los líderes independentistas y además pidieron a PSOE y Podemos, sus socios, que abandonaran la «equidistancia» mientras la ultraderecha de Vox pedía la ilegalización de Més con carteles en la propia cámara.

En cambio, la posición oficial de Compromís ha sido muchísimo más sosegada. La coalición ha lanzado oficialmente dos mensajes. El primero que la sentencia del Supremo de 10 y 13 años de carcel a los líderes del «procés» es desproporcionada y el segundo que la política ha fracasado. Con ello buscan remarcar la necesidad de diálogo y de una política útil como receta para la solución del conflicto. Un discurso que va en la línea de su alianza con Errejón, una relación que hay que entender dentro de la misma clave de moderación y que resitúa a la coalición dentro de la política española en el eje derecha-izquierda para escapar de la etiqueta independentista que la derecha le quiere colocar.

Por eso muy pocos, y menos los referentes del Bloc, se han desmarcado esta semana de la consigna de asepsia y distancia que los dirigentes de la coalición se habían recetado, como informó este diario, el día antes de que se publicara la sentencia del «procés.

Debate interno en el Bloc

Mientras, ayer se reunió el consell nacional del Bloc, el máximo órgano entre congresos del partido nacionalista. El debate interno de la semana ha radicado en una propuesta de resolución sobre la sentencia del «procés» que ha sido complicado de pactar entre las diferentes sensibilidades y que ha motivado un intenso debate.

Solo las dos corrientes internas del partido nacionalista, Bloc i País y Més, que es la reconversión de la antigua Bloc d'Esquerres i Sobiranista (BES), se han salido del guion durante estos días. Bloc i País apoya el rechazo a la sentencia del «procés» porque es vengativa y antidemocrática y defiende la libertad de los presos y que el gobierno catalán y el de España acuerden un referéndum como solución al conflicto.

Desde la corriente Més muestran su temor a que después de los sucesos en Cataluña, el valencianismo político se quede en un perfil bajo del que ya está. «Mañana podríamos ser nosotros», aseguran. En su opinión la sentencia está politizada y es injusta y los nacionalistas valencianos no pueden mirar para otro lado. También han llamado a participar en las manifestaciones convocadas por Acció Cultural y partidos como Esquerra contra la sentencia del Supremo.

La única militante del Bloc con un cargo de relevancia que ha aportado algo distinto como reacción a lo ocurrido en Cataluña ha sido la síndica adjunta en las Corts, Mònica Àlvaro que aseguró que la separación de poderes no existe en España, que la decisión judicial no era una sentencia sino una represalia a los presos y que votar no es delito, en referencia a un referéndum de autodeterminación como posible salida al conflicto.

Compartir el artículo

stats