El naviero Vicente Boluda, presidente de la Fundación Valenciana de Estudios Avanzados, impulsora de los premios Jaume I, demandó en su intervención un "gran pacto de estado por la ciencia, la investigación y el emprendimiento, y lo hacía otro año más porque "cada año pedimos lo mismo y, lamentablemente, tenemos la impresión de que queda en saco roto".

Para Boluda era importante que toda la sociedad "nos creamos que apostar por nuestros científicos es asegurar nuestro futuro" ya que la investigación económica "no da votos, pero puede evitar otra burbuja inmobiliaria. Las matemáticas puras no dan votos, pero pueden apoyarnos a encontrar la cura del Alzheimer. La investigación médica no da votos pero puede salvarnos la vida...".

El presidente de la FVEA, ha tenido además un reconocimiento especial, además de al rey Felipe VI por su apoyo a la ciencia, al profesor Santiago Grisolía, alma mater de los galardones. "Nuestro eterno agradecimiento por todo lo que ha hecho, hace y hará por la ciencia, la investigación y el emprendimiento".

Ribó: "Invertir en investigación es invertir en futuro"

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha puesto a los premios Jaume I como ejemplo del "compromiso" que la ciudad de València tiene con el apoyo al talento y a la investigación. "Invertir en investigación es invertir en futuro, en calidad de vida y oportunidades", ha dicho el regidor que ha tenido una mención especial para las dos premiadas en esta XXI edición de los galardones: la catedrática de Biología Molecular, la valenciana Pura Muñoz y la emprendedora y fundadora de la compañía HolaLuz. Según Ribó eran el ejemplo de "superación " y de la "ruptura de ese techo de cristal y ese suelo de barro que frena la vida de miles de mujeres y niñas".