El porcentaje de rechazo que acaba en el vertedero ha disminuido un 28,01 % durante el estado de alarma. Además, la cifra total de residuos entre el 14 de marzo y el 9 de mayo ha registrado un descenso del 13,09 % según los datos que maneja la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica. Cifras que el departamento que dirige Mireia Mollà achaca a las medidas «antipandemia» puestas en marcha para reducir la tasa de rechazo y garantizar la seguridad de los operarios y operarias de las plantas que han continuado trabajando al ser esta una actividad esencial.
La recogida selectiva de envases ligeros ha crecido un 17,98 % en este periodo respecto del mismo de 2019, un incremento similar al registrado hasta el mes de marzo, un16,22 %. Desde la dirección de Cambio Climático y Calidad Ambiental se destaca la mejora en las recogidas selectivas municipales, así como el reprocesado de residuos en varias instalaciones de tratamiento. La tendencia durante el confinamiento por la crisis sanitaria no difiere de los números entre el 1 de enero y el 9 de mayo, donde los restos a vertedero han bajado un 10,81 % en todo el territorio valenciano. «Muy por encima de la reducción de la producción, situada en un 3,34 %», remarcan.
Uso habitual de ecoparques
La conselleria confía en que la reapertura completa de los ecoparques, así como los residuos recogidos y almacenados en los mismos y las mejoras en las redes de ecoparques móviles puesta en marcha en 2020, compensará la bajada de recogida separativa en el período entre el 14 de marzo y el 9 de mayo en este tipo de instalaciones. «Se están convirtiendo en instalaciones de uso habitual para la ciudadanía a través de diferentes sistemas de incentivo», apuntan desde la administración autonómica.
La disminución en las cifras de restos que llegan al vertedero la achacan desde la conselleria a una mejora en las recogidas selectivas municipales o el reprocesado de residuos en varias instalaciones de tratamiento. También se incide en las campañas de divulgación así como a las inversiones de mejora en las plantas, «que han crecido un 13 % con respecto al anterior ejercicio y alcanzarán los 2,47 millones de euros», remarcan.
La entrada en vigor del Plan Integral de Residuos de la Comunitat Valenciana, un documento que se aprobó hace ahora un año, es clave para alcanzar los objetivos marcados por la Unión Europea para la próxima década.
Algo en lo que incide Mollà, que señala la gestión de los residuos como una tarea fundamental en tiempos de transición ecológica, abogando por «políticas de reducción en origen y preparación para la reutilización y por sistemas de gestión de residuos domésticos robusto y de mayor resiliencia».
Mollà, en ese punto, destacaba «la continuidad de todos los expedientes en gestión de residuos durante la crisis sanitaria, para garantizar más y mejores sistemas de recogida selectiva y tratamiento y el avance en el cumplimiento del Plan de Sellado de Vertederos» con la reactivación de las obras del vertedero de La Murada, en Orihuela, entre otros.
