La Generalitat ha intensificado las inspecciones en los prostíbulos. ¿Qué le parece?
Me parece muy bien, pero en la práctica se multan pero no se cierran. El problema en España es que si tenemos una alta incidencia del coronavirus es también debido a una alta incidencia de puteros. Nos han confinado, se han cerrado los centros educativos, pero se han seguido visitando burdeles, polígonos y rotondas. Los puteros han estado ahí, violando a mujeres, infectándolas con el virus y expandiéndolo.
El Consell alega que con la norma actual le resulta muy difícil actuar ¿Se puede hacer más?
Muchísimo más con lo que hay, pero hay que avanzar en una legislación abolicionista del sistema prostitucional. En 1995 se despenalizó la tercería locativa y esto llenó a España de burdeles, pero, además, en 2015 se despenalizó el proxenetismo no coercitivo, se dejó en manos de las mujeres esclavizadas demostrar que eran coaccionadas. Eso dio una impunidad prácticamente total a los proxenetas.
Dice que con lo que hay se puede hacer más. ¿Qué propone?
Sacar ordenanzas multando a los puteros y enviándoles las multas a sus domicilios. Eso tiene un efecto disuasorio brutal, porque ellos cuentan con la complicidad institucional. Siempre que se habla de prostitución se habla de mujeres, pero es cosa de puteros y proxenetas. Unos proveen la mercancía y otros la consumen. Es un negocio de hombres para hombres
¿Qué requisitos debe tener esa ley abolicionista para ser eficaz?
Los requisitos son la penalización de todo tipo de proxenetismo. ¿Cómo es posible que las instituciones que están para protegernos y para luchar por la igualdad despenalice el proxenetismo? Es ruin.
En cinco días la policía ha entrado en más de treinta locales, pero en lo que llevaba de año sólo sancionó uno en la Comunitat. ¿En materia de prostitución se mira hacia otro lado?
Claro. La prostitución es un privilegio patriarcal que los puteros no quieren perder: tener mujeres a su disposición. Los tenemos en las instituciones, en la policía, en medios de comunicación. Tratan de vender un discurso como si la prostitución fuera un trabajo para invisibilizar la violencia. Lo peor que les ocurre a las prostituidas no es el coronavirus, es lo que ocurre antes, ahora y siempre, el infierno que soportan. Viven una violencia sexual continuada y por eso, hay que penalizar a los puteros, porque violan los derechos humanos y alimentan a las mafias.
Pero el Gobierno ha puesto el foco en los burdeles por el alto riesgo de contagio ...
Lo que me viene a la cabeza es que la salud mental y física y la vida de las mujeres prostituidas no importan, que importa sólo la salud de los puteros o que no se expanda el virus,pero lo que sucede..
¿La pandemia puede ser una oportunidad para el debate?
Sí, puede serlo, pero el problema es que se está abordando desde una perspectiva sanitaria y se habla mucho sobre qué ocurre con las mujeres si cierran burdeles...
¿Y qué pasa con ellas?
Hay que darles un ingreso mínimo vital, una vivienda lejos de los criminales. Tiene que haber programas de ayuda integral y la ley abolicionista debe prever recursos. Pero eso no es suficiente, porque si el Estado ayuda a las mujeres a salir de la prostitución, pero no penaliza a los puteros, esas mujeres serán sustituidas por otras más jóvenes..
¿Qué el Consell se haya declarado abolicionista?.
Es muy buena noticia, pero se tiene que traducir en hechos. Llevamos años escuchando promesas que no se concretan y van en otra dirección. Y vemos que el lobby proxeneta tiene influencia también en los centros educativos. Se les abren las puertas para que vayan a dar charlas sobre el trabajo sexual, para captar a las jóvenes y buscar clientelas entre los chicos.
El Front ha sido muy crítico con la guía de educación sexual de la conselleria, ¿por qué?
Se habla de comprar sexo como una posibilidad para practicar y no fallar en las primeras relaciones sexuales con las chicas, por ejemplo, o se venden las bondades de la asistencia sexual. Se promocionan la pornografía y los vientres de alquiler como una técnica reproductiva. Esto es muy grave y esto es todo influencia de la industria.
¿Por qué cree que la sociedad es permisiva con la prostitución?
Porque el discurso sobre la prostitución no se mete de lleno en lo que está ocurriendo, en qué tipo de actos sexuales aberrantes les obligan a practicar porque no tienen límite y los puteros pueden pedir lo que quieran, sexo con embarazadas, sexo en grupo. Las mujeres tienen que tomar anestésicos para poder soportarlo,drogas, alcohol, porque eso es insoportable. Necesitan disociarse y todas acaban con un trastorno de estrés postraumático. La inmensa mayoría entraron en la prostitución porque fueron violadas de niñas. Es la máxima expresión de la violencia machista.
