Las discrepancias sobre la necesidad de aumentar los fondos públicos de los que se nutre À Punt son un clásico en la mesa del Botànic al inicio de cada curso político. Mientras Compromís y Unides Podem apoyaron ayer claramente la subida presupuestaria del 3,9 % -hasta los 58,3 millones de euros- planteada por el consejo rector de la radiotelevisión pública, en el seno del PSPV la propuesta ha sido acogida con tibieza y genera más recelos. Teniendo en cuenta la coyuntura de crisis económica y sanitaria, fuentes socialistas consideran «muy complicado» que la petición de À Punt, tal como se plantea, pueda ser avalada por la Conselleria de Hacienda, responsable de elaborar unos presupuestos difíciles de cuadrar que previsiblemente serán restrictivos -por la caída de actividad provocada por la pandemia- y tendrán que hacer frente a otras nuevas necesidades. Lo avisó el lunes el president de la Generalitat, Ximo Puig, al recalcar que, dadas las limitaciones existentes, toca «hacer más con menos» y ser más eficientes. Presidencia se ha mostrado hasta ahora muy lejos de respaldar aumentos de calibre en la cadena.

En Compromís, en cambio, se muestran partidarios de aprobar el borrador presupuestario presentado por À Punt porque, a juicio del síndic Fran Ferri, acercaría el cumplimiento de la ley, en virtud de la cual la Generalitat ha de destinar un mínimo del 0,3 % de su presupuesto al ente audiovisual, un objetivo que, según los valencianistas, no se cumple. «À Punt tiene que ser servicio público y el motor de la industria audiovisual valenciana que genera miles de puestos de trabajo», sentencia Ferri. A falta de estudiarla con más detalle en el seno del Consell, en Unides Podem también se muestran proclives a la subida. «La Generalitat ha de garantizar que se cubra el servicio público y los derechos labores en las condiciones óptimas», apunta la diputada Estefanía Blanes, presidenta de la comisión de la radiotelevisión pública. Blanes sostiene que, pese al aumento propuesto en la aportación del Consell, el gasto final de À Punt bajaría en 2021 por la imposibilidad de seguir utilizando los remanentes de 2016. La diputada del PSPV Mercedes Caballero destaca la importancia de que el consejo rector ofrezca un bosquejo de las necesidades de À Punt y, aunque asume que lo ideal sería dotar más fondos para aumentar la audiencia, recuerda que la decisión de autorizar el aumento está en manos de Hacienda. «Este año tenemos que ser más responsables incluso que en ejercicios anteriores a la hora de pintar los presupuestos. Primero hay que tener claras cuáles son las prioridades de la ciudadanía», advierte. À Punt atribuye el incremento planteado a la subida de los ingresos publicitarios y a la necesidad de destinar 1 millón de euros más de fondos a la adquisición de contenidos audiovisuales. El capítulo de personal, en cambio, quedaría intacto.