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Epidemia normativa en el Consell

Las medidas para restringir la actividad pública y privada y las ayudas para paliar la crisis copan las órdenes autonómicas

Una de las medidas del Consell ha sido el cierre del ocio nocturno. | F. BUSTAMANTE

548 resoluciones. La pandemia del coronavirus es sanitaria, pero también normativa. Desde que hace diez meses la covid-19 cambiara de arriba abajo la vida de las valencianas y los valencianos, la producción de normas de la Generalitat ha sido constante hasta el punto de que las distintas medidas acordadas por el Botànic superan el medio millar.

Durante este tiempo, el Consell ha tenido que emplearse a fondo para, conforme avanzaba la epidemia, elaborar y publicar todo tipo de resoluciones y órdenes que concretaran y dieran seguridad jurídica a las decisiones políticas, algunas de ellas inimaginables tan solo unas semanas antes. Las normas relacionadas con la covid-19 han desplazado cualquier otro tipo de acuerdos y en los momentos más críticos de la crisis, especialmente durante el primer estado de alarma, esta regulación ha copado días tras día el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana, convertido casi en un best seller con un incremento considerable de consultas.

El análisis de estas más de 500 resoluciones es una fotografía de cómo el Ejecutivo valenciano ha actuado frente a la pandemia. El grueso de esta normativa se reparte casi a partes iguales en dos grandes bloques. El primero es el que tiene que ver con las diferentes medidas restrictivas que el Ejecutivo comenzó a adoptar una vez se vio sepultado por la primera ola.

Resoluciones para restringir al máximo la actividad pública y privada acordes con el primer estado de alarma y el confinamiento decretado por el Gobierno central. Este bloque incluye también otro tipo de medidas para ir flexibilizando las restricciones cuando comenzó la denominada nueva normalidad. Se trata de paquete legislativo que ha afectado a servicios esenciales como los servicios sociales, la educación o el transporte, pero que, dentro del ámbito competencial de la Generalitat, incluía todo tipo de áreas, como por ejemplo, la incineración de cadáveres o la quema de rastrojos.

En total, en el periodo analizado, las diferentes conselleries elaboraron un total de 136 normas relacionadas con las restricciones o la desescalada.

El otro gran bloque de resoluciones covid-19 son todas aquellas relacionas con medidas de tipo económico, principalmente el amplio dispositivo de ayudas que el Consell ha tenido que implementar para salvar los sectores afectados por la crisis. Las ayudas relacionadas con los ERTE se cuentan con decenas, si bien el Consell ha salido al rescate de todo tipo de colectivos.

El impacto económico de las crisis es evidente con solo una ojeada a las diferentes órdenes de ayuda directa. Un total de 128 resoluciones reflejan medidas para afrontar la crisis económica. El resto de órdenes atienden a otras consecuencias de la pandemia, como la suspensión de plazos que ha obligado a las conselleries a prorrogar contrataciones, adjudicaciones o convocatorias de ayudas. La Generalitat ha tenido también que crear un cuerpo normativo sancionador específico al tiempo que regular las compras de material sanitario.

Decisiones drásticas

El recorrido por el corpus legislativo de la covid-19 es un claro reflejo de cómo la pandemia ha impactado de lleno en el día a día y cómo el Consell ha tenido que ir adoptando decisiones drásticas, propias de un situación de guerra. La primera resolución del Consell de la era coronavirus es de intendencia: la creación de la mesa interdepartamental para la prevención y actuación frente al coronavirus. Fue un 9 de marzo de 2020. La segunda, tres días después, marca el primer hito de la pandemia: el decreto del presidente de la Generalitat por el que se suspende y se atrasa la celebración de las fallas.

A partir de ahí, las resoluciones han sido un tobogán de medidas: cierre de colegio, suspensión de la actividad de las Corts, confinamiento de poblaciones, cierre perimetral, etc son algunas de las medidas más impactante que la ciudadanía ha tenido que ir digiriendo y que forman parte ya de su historia.

Duelo y homenajes con reflejo en el DOGV

La otra cara de la pandemia, aquella que tiene ver con el reconocimiento de los colectivos que trabajan en primera línea para luchar contra el Covid-19, también ha requerido producción normativa específica. La decisión del Consell de dar al pueblo valenciano la alta distinción de la Generalitat por su comportamiento durante la pandemia o de distinguir también al personal sanitario ha quedado registrado para la historia en resoluciones publicadas en el DOGV. Junto a ello, el duelo que se decretó el 17 de abril por las víctimas de la Covid-19.

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