Cáritas Valencia recogió más de 3.000 toneladas de ropa usada en 2020, la mayor parte de ella depositada por la ciudadanía en los más de 525 contenedores instalados en más de 300 localidades. Esto supone un aumento de casi el doble de municipios con contenedores respecto a 2019, según informa Cáritas Valencia. El resto de ropa procede de donaciones en las 390 parroquias de la diócesis así como entregas puntuales de empresas o instituciones. Este proyecto permite “seguir estando cerca de las personas en riesgo de exclusión” y dar una “segunda vida” a las piezas.