El 16 de marzo de 2015, la dimisión del vicealcalde de València Alfonso Grau por el caso Nóos (del que acabó absuelto) dejó al PP de la ciudad de València (PP VLC) compuesto, sin portavoz del grupo popular y sin coordinador de la campaña electoral. Los populares también se quedaron sin su «recaudador» para los comicios que debían celebrarse apenas dos meses después (el 24 de mayo de 2015) y que había permitido al PP VLC disparar con pólvora de rey en las elecciones de 2007 y 2011. Un dispendio que fue posible gracias a los 4,5 millones que presuntamente recaudó Grau vía «aportaciones» de contratistas o contratos de fundaciones municipales con las consultoras de comunicación contratadas para las campañas: Laterne PC y Trasgos Comunicación.
A Grau lo sustituye como portavoz y coordinador de campaña Alfonso Novo, que es quien declara ante la Guardia Civil que «la aportación de 1.000 euros para la campaña de 2015 fue una decisión adoptada por todos los integrantes del grupo municipal popular». Aunque después en el juzgado matizó que se acordó en la primera reunión preparatoria del comité de campaña a la que asistieron «seguro: Alfonso Grau, María del Carmen García-Fuster, Alberto Mendoza, Cristobal Grau, Julio Aguado y, probablemente, Julio Valero y Juan Pedro Gómez».
La decisión de aportar 1.000 euros se ejecuta con rapidez. «Entre el 23 de marzo y el 16 de abril 50 personas efectuaron los ingresos de 1.000 euros en la cuenta del grupo», según recoge el auto de apertura de procedimiento abreviado de la pieza del caso Taula que se sigue en el juzgado de instrucción nº18 de València. Una donación «legal» en el momento de los hechos que cruza todas las líneas rojas cuando se devuelve a todos los donantes la misma cantidad pero en dos billetes de 500 euros, presuntamente procedentes de dinero negro. «Corrupción total» que reconoció la exconcejala María José Alcón.
¿Qué indicios apuntalan esta tesis? Según el auto dictado por el juez, las declaraciones de cuatro testigos (asesores que se negaron a participar en la donación) y de otra asesora que hizo la donación, recibió los 1.000 euros de vuelta, pero los devolvió, por lo que tras cinco años investigada, la causa se ha sobreseído para ella. También las escuchas de la Guardia Civil a María José Alcón, a la que se investigaba por el pago de presuntas mordidas en la concejalía de Cultura. Alcón, fallecida en 2018, admitió el presunto blanqueo de capitales en dos conversaciones telefónicas. «Yo les tenía que hacer una transferencia legal de mi cuenta para blanquear dinero, vamos, corrupción total», relató a su hijo. Y «le dije que me hiciera una transferencia de esos mil euros que han blanqueado en el partido, de todo el dinero negro que tienen, y me dieron dos billetes de 500», admitió a su hermana. En una declaración posterior la exedil se desdijo y achacó estas palabras a la medicación que tomaba.
«Rómpase en caso de emergencia»
En el móvil intervenido a Pedro Aracil, asesor de Alcón, la Guardia Civil detectó un grupo de whatsapp en el que dos asesores, Juan Pedro Gómez Cerón y Luis Salom, bromean sobre qué hacer con los billetes de 500. «Si voy al banco me dirán otro tonto del PP», asegura Cerón en respuesta a la propuesta de Salom de enmarcarlos y «poner en el cristal ‘rómpase en caso de emergencia’». Por último, un anónimo enviado a la Fiscalía alertó de que el «nuevo recaudador Alfonso Novo» iniciaba la campaña electoral «con trampa», en alusión al pitufeo.
La causa se sobresee contra Medina, Moscardó, Tello y Navarro
Las administradoras generales del PP ante la Junta Electoral Central y Provincial en 2015, Carmen Navarro y Montserrat Tello, no serán juzgadas en la pieza A del caso Taula, al igual que Juan José Medina (coordinador de la campaña electoral de 2015) y Juan José Moscardó Úbeda (exgerente del PP provincial). El magistrado ha decidido sobreseer la causa respecto a ellos «de forma provisional y parcial, al no apreciar elementos indicativos de comisión del delito electoral», según el juzgado de Instrucción 18.
