Con el avance de la pandemia y el aumento del riesgo de contagios, los sindicatos han comenzado ya a presionar al Consell para que tome medidas y retome el teletrabajo para el personal funcionario de la Generalitat. En concreto, el sector de Administración Autonómica y Justicia de la Federación de Servicios Públicos de la UGT ha remitido un escrito a la Conselleria de Justicia y Administraciones Públicas en las que solicita que al menos el 30% de la plantilla pueda trabajar a distancia y sin desplazarse a sus puestos de trabajo. El sindicato apunta a que la evolución de la pandemia ha alcanzado ya las mismas cifras de contagio y de ingresos hospitalarios que existían cuando la Generalitat decidió reducir el aforo de las dependencias públicas permitiendo que hasta el 30% del funcionariado teletrabajara. La medida excepcional se eliminó en octubre y se decretó la vuelta presencial de todo el personal. UGT cree que esa medida, que se adoptó para poder garantizar con seguridad la prestación el servicio público y preservar la salud del personal empleado público" debe recuperarse mientras la presión hospitalaria se sitúe en zona de seguridad.

Por su parte, el CSIF se ha pronunciado también exigiendo agilizar el teletrabajo en la Generalitat y pidiendo que, como mínimo, se permita al personal empleado público con menores confinados a su cargo que puedan teletrabajar mediante una resolución de "deber inexcusable". La central sindical alerta del riesgo que supone mantener a 16.000 empleados públicos de la Generalitat físicamente en sus puestos laborales en lugar de optar por la prevención.

El CISF lamenta el retraso de las distintas conselleries en presentar un programa para el teletrabajo y valora que sí lo ha haya hecho la Conselleria de Economía. Sin embargo, advierte de que este plan está pendiente del visto bueno de la Dirección General de Tecnologías y de Función Pública y avisa de que el decreto que regula estos planes es "farragoso". "La lentitud contrasta con el incremento de contagios y las peticiones de muchos empleados públicos".

Cabe apuntar que el decreto que regula el teletrabajo contempla situaciones excepcionales que amparan que el Consell vuelva a decretar un determinado porcentaje de teletrabajo. La decisión, sin embargo, está en manos de la conselleria que dirige Gabriela Bravo.