La fuerza de la sexta ola, la más contagiosa de toda la pandemia, ya se nota en las residencias. Pese a ser de los espacios más protocolizados para evitar la propagación del virus debido a la vulnerabilidad de quienes viven en estos, la aparición de ómicron y el incremento de casos en la población general han provocado que estos centros multipliquen el número de infecciones por covid.
El crecimiento es de hasta 16 veces en el último mes entre los residentes. Así, de los 11 contagios que se registraron en la semana entre el 6 y el 12 de diciembre se ha pasado a los 181 que se han notificado en la última semana de la que el Imserso ha ofrecido datos, entre el 3 y el 9 de enero. También se han multiplicado el número de centros que tienen algún positivo en sus instalaciones: de siete a 45.
«Las residencias no pueden blindarse, si hay un aumento de contagios en el exterior van a subir los contagios en los centros», explica José María Toro, presidente de Aerte, la patronal de las residencias en la Comunitat Valenciana, quien apunta que no se puede evitar que haya trabajadores que se contagien «igual que lo hace el resto de la sociedad» o que lo haga un residente en una visita familiar.
No obstante, los números son hoy mucho más bajos que los sufridos en anteriores oleadas cuando no se encontraba con el escudo que ha cambiado el transcurso de la pandemia: la vacunación. En la misma semana de hace un año, con una incidencia de menos de la mitad de la que actualmente tiene la Comunitat Valenciana, las residencias contabilizaron cuatro veces más positivos, 786.
«Ha sido un acierto poner la tercera dosis en octubre y noviembre, ha permitido proteger a la población residente antes de un periodo que hubiera sido complicado», añade Toro. Esta inmunización ha propiciado un cambio en los efectos más adversos: la mortalidad.
Hace un año fallecieron 132 mayores, el 16 % de los contagiados, por los cuatro que lo hicieron en la última semana, con una letalidad del 2 %. De estos, Toro matiza que en muchas ocasiones personas son situaciones de salud delicada, inmunodeprimidas e incide que no es lo mismo fallecer «con covid», con prueba positiva de infección del virus, pero que el problema de salud lo cause otra patología que «por covid».
Problemas con las bajas
A los casos entre los residentes se suman los positivos del personal trabajador de estos centros. Así, en total, en los 327 centros de mayores de la Comunitat Valenciana en la última semana hubo hasta 337 personas con pruebas diagnósticas positivas del virus de las que 156 eran trabajadores, cinco veces más de los 32 registrados hace un mes.
E igual que ocurre en el resto de sectores, el presidente de la patronal admite que el aumento de estas infecciones entre el personal, con su correspondientes peticiones de baja, conlleva problemas con las plantillas. «Muchos centros están haciendo un esfuerzo de organización muy grande porque se quedan sin personal», desgrana Toro, quien señala la falta de profesionales sanitarios para contratar y pide «flexibilizar» los requisitos de contratación para situaciones puntuales.
La sexta ola y la variante ómicron del coronavirus en pleno invierno hacen que sea complicado diferenciar la gripe del resfriado y de la covid. Hay un síntoma que podría indicar que se está contagiado de Ómicron. Para averiguar si se ha contraído el virus conviene hacerse un test de antígenos, con precaución para que el resultado sea fiable. En caso de dar positivo consulta cuántos días debes permanecer confinado.
