La Conselleria de Justicia y Administraciones Públicas ha iniciado ya la tramitación del proyecto de decreto de creación de la Unidad Valenciana de Emergencias, un cuerpo especializado con capacidad para actuar ante cualquier catástrofe o emergencia, incluido el riesgo nuclear, químico o tecnológico, y que, según anunció el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, en el debate de política general de septiembre de 2020 estaría formado por un millar de efectivos con capacidad operativa y logística para intervenir en cualquier punto de la Comunitat Valenciana.
La idea de crear esta unidad, configurada como servicio público, empezó a anidar en la Generalitat con catástrofes como la DANA que arrasó varias comarcas de la Comunitat Valenciana, especialmente la Vega Baja, en septiembre de 2019 y, meses más tarde, la pandemia del coronavirus que paralizó el país y necesitó de actuaciones importantes de protección civil. El Consell destaca la actuación del servicio de bomberos forestales que desarrollo capacidades "más allá de las propias relacionadas con la extinción de incendios forestales". "Todo ello hizo palpable la necesidad de dotar a la Comunitat Valenciana de recursos ampliados en materia de respuesta a las emergencias con con capacidad de actuar de manera inmediata ante cualquier emergencia de protección civil tanto ordinaria como extraordinaria", según el preámbulo de la norma.
Así, partiendo de las competencias propias del cuerpo de bomberos y bomberas forestales, la UVE quedaría adscrita a la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias. Entre sus fines, está actuar frente a supuestos de grave riesgo, catástrofe o calamidades. Así, entre las funciones, el proyecto enumera la extinción de incendios, las emergencias de origen meteorológico (nevadas, vientos, inundaciones) así como todo tipo de catástrofes causantes de crisis sanitarias, pandemias, contaminaciones graves, desabastecimiento de productos de primera necesidad, paralización de servicios públicos, emergencias sísmicas o maremotos, entre otros.
Riesgo químico, nuclear o biológico
La conselleria prevé funciones extraordinarias para las que se necesitará un alto nivel de especialización y se habla de actuaciones logísticas derivadas de riesgos tecnológicos (químico, el nuclear, el radiológico y el biológico), crisis medioambientales, protección de bienes de interés cultural y colaboración en búsqueda y rescate de personas.
Respecto a la operatividad, la conselleria prevé la constitución de un Puesto de Mando Avanzado, así como la posibilidad de poner a disposición de la UVE con carácter temporal medios materiales y humanos de otros departamentos de la Generalitat y su sector público, así como de ayuntamientos.
La conselleria prevé funciones extraordinarias con un alto nivel de especialización y se habla de actuaciones logísticas derivadas de riesgos tecnológicos
La UVE descansará parte de su estructuras en la ya existentes, básicamente, en la Agencia de Seguridad y la Sociedad Valenciana de Gestión Integral de los Servicios de Emergencias. Aún así, si las previsiones del decreto se cumplen, la UVE será potente en cuento a recursos. Así, contará con unidades de bomberos forestales, autobombas, unidades helitransportadas, personal técnico operativo, jefaturas de dotación, personal de operación de comunicación, recursos de coordinación, gestión, logística, selección y formación.
El texto, que ahora entra en fase de audiencia pública, comprende tres fases para la implantación total de la UVE. La primera es la adscripción de los medios y efectivos humanos cuando se apruebe el decreto. La segunda fase tendrá que completarse antes de un año y, para ello, habrá que duplicar el personal técnico de las unidades helitransportadas así como la dotación del resto de puestos técnicos de mando y control y la puesta en marcha de tres centros tecnológicos. En la tercera fase se espera que la unidad esté plenamente en funcionamiento.
