La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, no tiene ninguna intención de dimitir. Ni ahora ni cuando se consume su imputación, que la propia lideresa de Compromís parece dar por hecha y que considera dentro de un proceso de total normalidad.

El juez ya preguntó en el mes de noviembre del año pasado a las Corts por la condición de diputada de la vicepresidenta. Una formalidad, al tratarse de un cargo aforado, que la cámara autonómica ya ha certificado. Además, el juez argumenta que no se pueden dar más pasos en la investigación sin que la propia consellera figure como investigada para no quebrantar su derecho de defensa después de que se aprecien «indicios racionales» de participación en un posible encubrimiento en el caso de los abusos a la menor por el que su exmarido fue condenado a pena de prisión .

En ese estado de situación, la preocupación se ha disparado en el Botànic a poco más de un año de las elecciones ante la posible investigación a la vicepresidenta. Todas las alarmas se han encendido por las consecuencias políticas que puede acarrear. Encarar la precampaña con la vicepresidenta investigada puede suponer un lastre importante.

En Compromís, la sensación que se traslada es que están dispuestos a aguantar el temporal y el asedio de la oposición y el cierre de filas con la vicepresidenta es total. El presidente, Ximo Puig, pide dejar trabajar a la justicia y asegura que tiene confianza plena en los tribunales.

"La verdad solo tiene un camino", ha asegurado Oltra esta tarde en declaraciones a los medios antes de participar en un acto en Madrid en el Ministerio de Asuntos Sociales que dirige Ione Belarra.

Preguntada a su llegada si se plantea la dimisión, la vicepresidenta responde que no: "Ni por esto, ni porque lo pida el PP, que está rabioso porque nosotros trabajamos mucho para que se viera su desastre de corrupción y malversación y cómo desviaban el dinero mientras no había recursos para sanidad, dependencia o para las familias y ellos se enriquecían con todos sus saqueos".

En Compromís insisten en que la imputación de Oltra no es por corrupción, como ocurría en los tiempos del PP y que la coalición se hartó de denunciar y que en muchos casos acabaron en condena y pena de prisión. Oltra recordaba este mismo viernes que la última vez que tuvo que declarar como imputada (investigada) en el Tribunal Superior de Justicia (TSJCV) fue por una querella que le había presentado el exconseller popular Rafael Blasco, que acabó en la cárcel por robar los fondos de cooperación.

Por eso en la coalición, donde admiten que la situación creada no es nada cómoda, insisten en que los casos son totalmente distintos y subrayan que ya hace meses que la derecha busca precisamente la imputación de Oltra, una condición a la que restan importancia porque ya habido casos esta misma legislatura, los de altos cargos como Enric Nomdedéu o Rubén Trenzano, que quedaron archivados.

Ello pese a que Compromís y la propia Oltra pusieron en su momento el listón de las imputaciones alto y en muchos casos exigieron dimisiones por la mera imputación cuando gobernaba el PP. Pero en la coalición remarcan que no hay ninguna condena por corrupción que afecte a la coalición.

Nadie en Compromís quiere hacer futuribles sobre si Oltra puede convertirse en candidata a las elecciones de 2023, a un año vista, con el cartel de investigada

Con todo, nadie quiere hacer futuribles sobre si Oltra puede ser la candidata a las elecciones de 2023, que ya están casi a un año vista, con el cartel de investigada y se aferran a que no es una imputación por corrupción y a que hay precedentes de otras causas que han quedado en nada e incluso en muchos casos han acabado en llamadas de atención de los tribunales a los querellantes por judicializar determinadas cuestiones.

"El juez hace su trabajo de investigación y de interrogatorios para saber qué ha pasado y en la pirámide de las personas que formamos parte de la Conselleria de Igualdad estoy yo y como el juez no puede llamarme directamente, lo deriva al TSJ por lo tanto todo entra dentro de la normalidad y de un trabajo concienzudo y prolijo", señala la vicepresidenta que afirma que dará explicaciones "como lo he hecho siempre".

Preguntada Oltra sobre si dimitirá ante una posible imputación, Oltra responde: "No tengo ninguna razón para dimitir. Yo dije que la decencia no la marcan los tribunales ni la línea ética, pero aquí no se ha producido ninguna ilegalidad. Todas las personas que han desfilado por el juzgado en las últimas semanas han dejado claro que no ha habido ni ordenes ni instrucciones, sino dejarlos trabajar en libertad y desde la profesionalidad", ha añadido.

"No hay un solo indicio, no hay delito ni indecencia, por lo que no puede haber una consecuencia jurídica; esto es una querella de la extrema derecha y se apunta el PP porque no le ha venido bien que gobernemos y que no pueda seguir saqueando", señala Oltra.

La vicepresidenta insiste: "No puede haber sentencia condenatoria, porque no hay ilegalidad; si la hubiera pues todos hacemos lo que dice la justicia". 

Mientras, la coalición Compromís ha mostrado este viernes oficialmente el máximo apoyo, reconocimiento y afecto a su coportavoz y vicepresidenta del Consel, después de que se haya elevado petición para su citación como investigada al TSJCV.

Compromís señala la total confianza en la actuación de Mónica Oltra sobre el que ya ha dado explicaciones en numerosas ocasiones tanto en sede parlamentaria como a los medios

Desde Compromís oficialmente se alude a la total confianza en la actuación de Oltra en este caso, sobre el que ya ha dado explicaciones en numerosas ocasiones tanto en sede parlamentaria como a los medios, señala la coalición. "La gestión sobre este caso ha sido en todo momento transparente, poniéndose a disposición de la oposición toda la documentación que han pedido y con comparecencias de la vicepresidenta en las Cortes tanto a petición propia como a petición de los grupos parlamentarios.

Compromís insiste, como Oltra, en que este procedimiento parte de acciones impulsadas por la extrema derecha, a las que "lamentablemente está haciendo seguidismo la derecha, en una deriva política inaceptable que tiene como único objetivo su desgaste personal y político", añaden fuentes oficiales de la coalición.