Que estos últimos días el calor ha sido extraordinariamente intenso no es nada nuevo, pero lo sorprendente ha sido que esta vez ni siquiera la brisa refrescaba como suele hacerlo en las horas de la tarde en Valencia, un territorio dominado por el régimen de brisas marinas debido a su situación junto al Mediterráneo. Esta ausencia de brisas ha provocado, de hecho, que las altas temperaturas hayan sido aún más sofocantes y que hayan generado una gran sensación de bochorno que no ha remitido ni durante las horas de la noche o la madrugada.

¿Por qué? ¿El mar ya no refresca como lo hacía antaño? Pues no, no lo hace por la elevada temperatura que están alcanzando las aguas mediterráneas y la ausencia de un ligero viento que alivie las tórridas temperaturas veraniegas en el territorio es, tan sólo, una consecuencia más de esta inédita (y nefasta) situación medioambiental.

La semana pasada el mar Balear, considerado como las aguas comprendidas entre Cataluña, Islas Baleares y Comunitat Valenciana, superó por vez primera la barrera de los 29 grados, algo que recibió mucha atención desde todos los estamentos. Pero lo peor no fue que se alcanzase esa temperatura, sino que se hayan prolongado en el tiempo unos valores tan altos para las aguas del Mediterráneo más occidental, tal como señala la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en la Comunitat Valenciana.

Por qué es tan importante la temperatura del mar

La consecuencia de un mar extraordinariamente cálido se refleja, entre otras cosas, en la ausencia de brisas o, al menos, en la debilidad de éstas. Esa circunstancia lleva a que las brisas, en caso de darse, sean tan flojas que apenas penetran unos kilómetros tierra adentro, sin llegar a refrescar ni siquiera el prelitoral valenciano.

Así, cuando hay brisas, éstas son débiles y muy cálidas, con lo que no refrescan el ambiente y, cuando se dan, son tan exiguas que apenas alivian de noche las altas temperaturas si no es casi al borde del mar.

Las temperaturas en Valencia en los últimos días han sido extraordinariamente altas con la ola de calor. FERNANDO BUSTAMANTE

Esto, unido a lo elevado de las temperaturas mínimas que estos días se están registrando en Valencia, hace que "el bochorno y la sensación de calor nocturno" se disparen. No en vano, muchas de estas últimas noches han sido imposibles de soportar sin aire acondicionado o ventilador debido a que en ocasiones la sensación térmica sobrepasaba incluso los 31 grados.