Compromís presume de su gestión educativa y aspira a llevar Sanidad

Baldoví reclama una política de renovables que prime los intereses de vecinos y ayuntamientos

Baldoví se hace un selfi con Marzà y otros candidatos de Compromís en Castelló. | GABRIEL UTIEL

Baldoví se hace un selfi con Marzà y otros candidatos de Compromís en Castelló. | GABRIEL UTIEL / bartomeu roig. castelló

Bartomeu Roig. Castelló

Desde que se aprobó el primer gobierno del Botànic, Compromís ha llevado las riendas de dos de las áreas más sensibles, y de las que más recursos requieren: educación e inclusión social. Ahora, con la cita del 28 de mayo, la coalición quiere ser más determinante en el caso de que se repita un gobierno como el de los últimos ocho años, y por eso quieren también gestionar la sanidad.

Este fue uno de los mensajes recurrentes en el mitin principal de Compromís en Castelló, con el candidato a la presidencia de la Generalitat, Joan Baldoví, y el cabeza de lista a las Corts por Castellón, Vicent Marzà. El que ha sido hasta esta semana diputado en Madrid afirmó que su formación «quiere ser el perejil de todas las salsas» en la Generalitat y remarcó que para los próximos cuatro años son «necesarios».

Marzà, conseller de Educación durante la mayor parte de los ocho años del Botànic, sacó pecho de su gestión en esta conselleria. «Cada 20 días se ha estrenado un colegio nuevo», dijo, para añadir que cuando entró «las ratios eran de 30 alumnos por aula y ahora son de 22».

Con este balance, «queremos fortalecer la sanidad como hemos hecho con la educación», con la contratación de más médicos y enfermeros, una especial atención a la salud mental y la creación de centros de especialidades para los habitantes del interior, de modo que puedan acudir a consultas a menos de 30 minutos de sus casas.

El candidato a la alcaldía de Castelló, Ignasi Garcia, también puso el foco en la sanidad, para referirse al proyecto del nuevo hospital General de Castelló. «Dijimos que necesitamos un centro con camas individuales, y nos dijeron que éramos partidistas, hasta que las asociaciones de pacientes e incluso los equipos directivos solicitaron lo mismo e hicimos rectificar a la conselleria», afirmó.

Uno de los asuntos centrales de la intervención de Baldoví (algo más breve de lo previsto por la amenaza de lluvia) fue la gestión de los proyectos de renovables. Afirmó que las empresas que presentan estos planes, como la Magda, «quieren gastar poco y destruir el territorio en beneficio propio» e incluso afirmó que el candidato del PP, Carlos Mazón, «quiere cosechar para las empresas que hacen negocio de la educación, la sanidad o la energía». Por eso reclama que los proyectos se gestionen «con el consenso de los vecinos y ayuntamientos».

La número dos a las Corts, Vero Ruiz, mencionó que a la derecha le molesta que «seamos la fuerza que quiere cambiar la sociedad», con medidas como «la defensa de los derechos LGTBI o la eliminación de los vestigios del horror», en referencia a la retirada de la cruz del Ribalta. «Lo hicimos y lo volveríamos a hacer», dijo.