Traigo buenas noticias para los amantes de la astronomía

La noche del 12 al 13 de agosto será cuando mejor se vea la lluvia de estrellas.

La noche del 12 al 13 de agosto será cuando mejor se vea la lluvia de estrellas. / Efe

Natacha Payá

Para los amantes de la astronomía y para muchas personas, la lluvia de estrellas perseidas es la más importante del año. Por las fechas vacacionales en las que ocurre y por la bonanza meteorológica son las que más audiencia tienen. ¿Le gustaría cazar alguna?

Las perseidas conforman una de las cuatro principales lluvias de estrellas del año y se han convertido en uno de los fenómenos astronómicos con más fieles. Como todas las estrellas fugaces, estas no son más que las partículas de polvo y materiales rocosos que desprende el cometa 109P/Swift-Tuttle.

Durante el desplazamiento de este cometa los fragmentos se sueltan a causa de las fuerzas de marea del Sol. Cada año, la Tierra pasa por esos fragmentos que entran en contacto con la atmósfera. Ese impacto y posterior viaje por nuestro «mar de aire» genera los característicos destellos que tanto nos gustan. 

Se les conoce comúnmente como «lágrimas de San Lorenzo» en los países de tradición católica. Esto se debe a que el pico máximo suele caer alrededor del 10 de agosto, el día de San Lorenzo. Este día recuerda el martirio que sufrió el santo en Roma cuando fue quemado en una hoguera, allá por el año 258.

Swift-Tuttle completa su órbita tras 133 años y la última vez que pasó cerca de nuestra estrella fue en 1992. Ese año dejó la corriente más densa de escombros y en la Tierra pudimos disfrutar de noches espectaculares, con multitud de destellos. Según el Observatorio Astronómico Nacional, se estima que la magnitud de esta lluvia irá decreciendo hasta su repunte en 2125 o 2126, cuando la ruta del cometa sea cercana al Sol. 

Su pico de máxima actividad está previsto para la noche del 12 al 13 de agosto, aunque muchos observadores podrán ver alguna estrella despistada desde el 17 de julio. Su tasa de actividad puede llegar a los 200 meteoros por hora, viajando a 50 kilómetros por segundo. Este año será excelente para observarlas, puesto que su máximo se producirá tres días antes de la Luna nueva.