"Contra la despoblación, tan importante es atraer a gente nueva como cuidar a los que viven aquí"

Luis Francisco López Yeves, presidente de la Mancomunidad del Interior Tierra del Vino.

Luis Francisco López Yeves, presidente de la Mancomunidad del Interior Tierra del Vino. / L-EMV

Amparo Soria

Amparo Soria

Presidente de la Mancomunidad del Interior Tierra del Vino. Alcalde de Venta del Moro desde 2011, Luis Francisco López Yeves asume la presidencia comarcal con un objetivo: ser el «altavoz» de todas las demandas que los nueve municipios de Utiel-Requena tienen para las distintas administraciones. 

Es su primer mandato como presidente. ¿Cómo se siente?

Estoy muy contento, muy ilusionado y con ganas de intentar aportar lo que pueda en la medida de mis posibilidades. Tengo experiencia en la casa, pertenecemos a la mancomunidad desde hace tiempo y yo entré de alcalde en 2011.

¿Hay sintonía política entre todos los partidos? ¿Hay unanimidad?

Sí. Hubo unanimidad en el voto y nuestra mancomunidad siempre se ha caracterizado porque el 99,8% de las decisiones que tomamos en el Pleno han salido siempre por unanimidad, pese a que hay representantes de diferentes partidos políticos y, por tanto, diferentes ideologías. Si algo nos caracteriza es precisamente en haber ido siempre todos a una. Hay muy buen ambiente y yo creo que eso también es un aliciente para hacer cosas relevantes, y eso se transmite a la sociedad. En todas las cosas que son importantes para la comarca estamos de acuerdo. Es algo para sentirse orgulloso por parte de todos, no solo de quien ostenta la presidencia.

¿Qué legado le dejan sus antecesores?

Una mancomunidad muy cohesionada, con proyectos que empezaron y que ya dan sus frutos, como puede ser el Plan de Gobernanza y Dinamización Turística o el Plan de Sostenibilidad en Destino. En Servicios Sociales se ha ampliado la oferta, hay asesoramiento técnico para la orientación laboral de desempleados y para creación de nuevas empresas. Hay muchos aspectos heredados que se van a mantener e incrementar.

Además de los ya implementados, ¿qué retos se ha marcado?

A priori quiero continuar con los grandes proyectos en Turismo, también en cohesión territorial con el permanente contacto que tenemos con otras entidades comarcales para el desarrollo socioeconómico, laboral y educativo de la comarca. El reto más importante que me planteo es que la mancomunidad sirva de altavoz potente para reivindicar las necesidades que tenemos en la comarca. Todos unidos y de la mano de otros colectivos podemos llegar lejos. Hay que poner en valor la agricultura, el futuro de nuestros jóvenes, que vean que esta es una tierra de futuro y que se pueden quedar a vivir y trabajar. Queremos dinamizar el turismo y la cultura.

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"No solo hay que limpiar los montes, hay que fomentar la agricultura; en Venta del Moro los cultivos frenaron el fuego"

Uno de los retos marcados en la agenda de esta mancomunidad es el Medio Ambiente, con el incendio en su municipio del verano pasado.

Nuestra comarca tiene un potencial natural tremendo. Contamos con dos parques naturales. Tenemos 172.000 hectáreas de superficie, de las cuales 93.800 es superficie forestal y protegida, por lo que hay que reivindicar que se ponga en valor y que las obligaciones del mantenimiento no solo recaigan en nuestros municipios, sino que sea una responsabilidad compartida por parte de las diferentes administraciones. Precisamente para evitar tragedias. No hablo solo de la limpieza o la ordenación de los montes, sino de potenciar también una agricultura atractiva. Como se demostró en ese incendio de Venta del Moro, el cultivo es el mejor cortafuegos. Es vital y fundamental que la agricultura y la ganadería extensiva vayan de la mano con el mantenimiento del entorno forestal.

Además, en vuestro caso la agricultura es un motor económico.

Claro. Te decía que teníamos 172.000 hectáreas de superficie, pues 60.000 están cultivadas, es entorno agrícola. Económicamente, es uno de los motores, y creo que la mancomunidad tiene que ser la punta de lanza porque, sin ser competencia directa, debemos actuar como altavoz para dignificar la agricultura, que sea rentable. Junto con asociaciones agrarias, el Consejo Regulador de la DO Utiel-Requena, agricultores, viticultores, ganaderos y con todas las personas que tienen relación con el campo.

También el Turismo coge cada vez más peso.

Sí. Desde la Mancomunidad se han hecho grandes esfuerzos e inversores en materia de turismo con la Diputación de Valencia y con Turisme de la Generalitat para fomentarlo y que nosotros nos creamos que tiene potencial, ofrecerlo al visitante. Sin olvidarnos, claro, de sectores como la industria que también dinamizan la comarca.

¿Hay que potenciar más la industria?

Sí, tiene que resultar atractiva. Nos pasa como con la agricultura, que tiene que ser atractiva para nuestra gente y para que la dignifiquen. Tenemos un tejido empresarial e industrial al que hay que ayudar y fomentar fiscalmente para que sea otro foco económico y que vuelva a coger la fuerza que siempre ha tenido.

"Hay dar medios y posibilidades a los jóvenes para que sepan que en su comarca, en su tierra, tienen oportunidades"

Hablaba antes del futuro de los jóvenes e inevitablemente va unido a la despoblación. ¿Hay solución?

Si supiésemos la fórmula que no te quepa duda que ya la hubiésemos puesto en marcha. Es complicado. Es una conjunción de diversos factores y no se puede revertir por arte de magia. Hay medidas que pueden implementarse y que reflejen esa singularidad que tiene el mundo rural y eviten que esa mancha de aceite se extienda más. Habría que empezar por la juventud, explicándoles, enseñándoles y dándoles los medios y posibilidades para que sepan que en su comarca, en su tierra, tienen oportunidades para desarrollar su vida personal y laboral.

¿La mancomunidad ha implementado medidas?

Se está haciendo en los colegios e institutos de la comarca, enseñándoles que el que quiera estudiar o trabajar puede hacerlo en la comarca. Es uno de los objetivos: incrementar la colaboración con los centros educativos para que los jóvenes vean que aquí también se puede vivir. Tenemos además el Servicio de Juventud que ha dinamizado mucho la vida de los jóvenes.

Apostar por los que viven allí, más allá de atraer población, ¿no?

Muchas veces pensamos que las políticas para frenar la despoblación tienen que ir a atraer a nuevos vecinos. Está bien, pero también hay que cuidar a los que estamos aquí, que son los que levantan la persiana todos los días y asumen costes que cuesta más tiempo compensar con beneficios. Tan importante es ayudar a fomentar que venga gente nueva como ayudar a los que están, porque lo que tenemos aquí es gracias a ellos y su esfuerzo. No son incompatibles.

¿Qué relación tienen con la Mancomunidad de El Tejo, también de Utiel-Requena?

Hay una buena relación porque tanto Chera como Requena pertenecen también a nuestra mancomunidad. Siete Aguas no. A nivel institucional nunca ha habido una relación intensa, ni para bien ni para mal, cada mancomunidad ha hecho lo que ha considerado y la relación es cordial, a los hechos me remito.