La perrera comarcal de El Palomar, que presta servicio a la Mancomunitat de la Vall d'Albaida, recogió el año pasado 547 perros, una cifra que supone casi la mitad de los ingresos en los últimos años. Según los datos que ayer difundió la entidad supramunicipal, del total de los animales, 401 fueron adoptados y 60 recuperados por sus propietarios. Las mismas fuentes recalcan que que los canes salen del complejo vacunados contra la rabia, desparasitados, con chip y pasaporte. En 2014, la perrera gestionó 416 adopciones y 71 retornos a sus dueños.

Varias razones pueden explicar el descenso del número de ejemplares recogidos. Entre los factores señalados por la Mancomunitat destacan el cobro de tasas, la reducción del volumen de animales domésticos como consecuencia de la crisis y la mayor concienciación de la sociedad.

Aún así, los meses de abril y mayo registraron, como cada año, un notable repunte del número de recogidas. En muchos casos, se trata de cachorros regalados por Navidad que, pasados los meses, se han hecho grandes y sus propietarios optan por abandonarlos al no poder hacerse cargo. En cualquier caso, es con la llegada de las vacaciones de verano, durante los meses de julio y agosto, cuando más trabajo tiene la perrera, que apela a la responsabilidad ciudadana de aquellos que hayan regalado o recibido una mascota esta Navidad porque «no son juguetes, son seres vivos con una serie de necesidades de las cuales se tiene que hacer cargo el propietario», remarcan. Por eso, los responsables del servicio piden a los amos de las mascotas «que se lo piensan dos veces antes de regalar» .