El alcalde de Albaida, Josep Antoni Albert, reclamó ayer a la Mancomunitat de la Vall d'Albaida establecer un calendario de plazos para saldar la deuda —que supera los 1,7 millones de euros—, y que estos plazos comiencen en 2017, «cuando la situación económica del ayuntamiento no será tan asfixiante», afirmó ayer el primer edil. La retirada de servicios anunciada por el presidente de la mancomunidad, Vicent Gomar, hizo saltar las alarmas en el gobierno albaidense, que negocia con el organismo comarcal vías para liquidar la deuda.
Albert aclaró que la suspensión de los servicios de perrera y archivos es de 2013 y «fue a petición de este ayuntamiento». El entonces gobierno de Compromís y PSPV «acordamos que ante la situación económica municipal, estos dos servicios no eran imprescindibles, por lo que pedimos la suspensión temporal de los mismos», aclaraba ayer el alcalde. Desde la Mancomunitat expusieron que, pese a que Albaida renunció a estos dos servicios, el anterior gobierno de la mancomunidad los continuó prestando, y con la llegada de Gomar se ha «normalizado» la situación, dejando de prestar el servicio, tal como pidió Albaida.
Josep Albert también aclaraba ayer a este periódico que el servicio de la recogida de la basura no se ha suspendido. «No se puede retirar un servicio de un día para otro, eso hay que trasladarlo primero al consistorio y además, en la mancomunidad tiene que darse traslado a la junta de gobierno, y eso no se ha producido», aseguraba Albert, que es miembro de la junta de la mancomunidad. Desde el organismo comarcal señalaron que en el caso de la basura fue «una advertencia» a los municipios morosos si siguen sin saldar las deudas y Albert lamentó el «tono amenazante» de Vicent Gomar.
El alcalde de Albaida pidió a la Mancomunitat de la Vall «que sean conscientes de nuestra situación». El consistorio arrastra una deuda de 17,5 millones heredada de anteriores gobiernos y el Estado le retiene el 50 % de su aportación para hacer frente al pago a proveedores. Josep Albert reveló que el pasado lunes mantuvo una reunión con el presidente y el conseller de Medi Ambient de la Mancomunitat de la Vall para abordar la deuda y las posibles medidas para liquidarla. La petición de Albaida es establecer plazos, pero que estos se inicien el próximo año, cuando se prevé que las cuentas estén más desahogadas, una medida que, al parecer, no convence a la Mancomunitat. Albert señaló ayer que «estamos pagando, aportando una cuantía cada mes, aunque no cubrimos el coste de los servicios de la mancomunidad». El alcalde aseguró que «nos gustaría liquidar toda la deuda, pero si no pagamos es porque no podemos». «La deuda no la ha generado este gobierno, viene del de Bodí [Joan Bodí, PSPV] y, sobre todo de Beneyto [Juan José Beneyto, PP], que provocó el mayor agujero», incidió Albert, quien afirmó que el ejecutivo de Compromís «hemos sido el primer gobierno que ha pagado más de la mitad de la deuda con la mancomunidad».
Sobre las vías para liquidar la deuda, Josep Albert no descarta destinar una parte de las ayudas que reciben de la Diputació de València, tal como se plantea Benissuera. Aunque el alcalde de Albaida propone que la Diputació o la Generalitat «creen una línea de subvenciones para gasto corriente, para hacer frente a las deudas», una opción que dijo haber tratado con alcaldes de otros municipios morosos, como el de Gandia.
