El profesor de Economía de la Universidad Politécnica de Valencia, experto en movilidad, destacado activista y portavoz de la Plataforma pels Ferrocarrils del País Valencià, Vicent Torres, hizo una documentada defensa del tren Xàtiva-Alcoi en su intervención días atrás en Ontinyent, invitado por la plataforma Salvem el Tren. La defensa de esta línea «no es romántica o nostálgica, sino práctica y de vital importancia para las comarcas centrales», destacó.

Torres detalló las fechas clave en el deterioro de la línea, entre ellas la más funestas: 1984, el año en el que el Gobierno central decreta el gran cierre de líneas. «Ni inversiones ni mantenimiento. es la época de los convenios con comunidades para mantener líneas deficitarias», recordó. En 1987 (plan de transporte ferroviario) se comenzó a potenciar la red principal y a abandonar la secundaria. Pero además, «todo se fue al AVE Madrid-Sevilla» que promovió González. Y en los 90, el «AVE para todos de Aznar» remató la faena, con el planteamiento de que todo vaya a parar a Madrid y el eje mediterráneo ya no fue prioritario, situación que pervive hasta hoy.

Sobre el tren de Alcoi y su deterioro citó como hechos más relevantes el incendio que quemó traveseras de madera en 1994 y que ralentizó la velocidad durante años, la nueva amenaza de clausura de 1995 y la movilización social que alejó el fantasma del cierre en 1996 o el que la Generalitat asumió el déficit del servicio. «Pero la situación siguió y sigue siendo precaria. Se elaboran proyectos pero sin presupuesto, mientras que sí se invierte en otras infraestructuras, como la autovía central», criticó. Torres recordó el protocolo Generalidad-Ministerio de Fomento, de 2009, que establecía que cada administración se compromete a renovar una parte del trayecto: Fomento, el tramo Xàtiva-Benigànim y Montaverner-Alcoi (presupuestado en 35 millones de euros) y la Generalitat el tramo Benigànim-Montaverner (30 millones de euros). «Pero hasta la fecha, ninguna administración ha hecho las inversiones acordadas. La línea continua sin mantenimiento y con inversiones mínimas. El mantenimiento le cuesta dos millones euros al año a la Generalitat. Mientras tanto, en la Autovía Central se han invertido 316 millones de euros», recalcó.