La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) ha denunciado que los trabajadores del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Ontinyent, que también se ocupa de Violencia sobre la Mujer, llevan ventiladores y refrigeradores debido a las altas temperaturas en el local. La central sindical ha señalado que a la falta de reparación del aire acondicionado, se suman las estrechas dimensiones del juzgado. El sindicato ha alertado en un comunicado de su "abandono".

CSI·F ha recordado que este juzgado se caracteriza por su espacio reducido y "abarrotado de expedientes". Los ocho funcionarios allí destinados realizan su labor en apenas 25 metros cuadrados. La sala de espera consiste en un rellano con dos sillas instaladas al lado de sendos escalones. "En tan diminuto espacio se juntan menores con detenidos o víctimas de violencia a escasos metros de agresores", ha señalado.

El sindicato ya alertó el pasado 8 de junio a la Dirección General de Justicia de la falta de funcionamiento del aire acondicionado. No obstante, desde entonces no se ha llevado a cabo su reparación. La central sindical ha advertido de que de no producirse una solución en breve, el delegado de prevención podría plantear la paralización de la actividad.

CSI·F ha insistido en que los empleados públicos llevan ventiladores y hasta refrigeradores de su casa para atenuar el calor. No obstante, estas soluciones provisionales no evitan que la temperatura alcance los 30 grados. "La falta de climatización se suma a los numerosos problemas del juzgado, como las goteras que tiene y que provocan que los propios trabajadores hayan adquiridos plásticos para cubrir los expedientes y evitar su deterioro", ha dicho.