El ruinoso estado de viviendas en el casco urbano y los peligros de daños ante el deterioro de las mismas va en aumento en Ontinyent. El ayuntamiento ha instado a los propietarios de dos viviendas en la calle Santa Rosa, en el barrio de Poble Nou, a que acometan una serie de actuaciones para reparar y asegurar las condiciones del inmueble. Se trata de los números 29 y 24 de esta céntrica calle y en la primera de ellas, después de unos desprendimientos y el inminente riesgo de nuevos derrumbes, el gobierno de Jorge Rodríguez ha emitido una orden de ejecución subsidiaria (el consistorio realizará las obras y después las abonará la propiedad) para adoptar unas medidas cautelares para evitar daños.
La edificación ha sufrido unos desprendimientos en la fachada de «importante entidad», según recoge el informe técnico municipal, por lo que el consistorio procederá a retirar el revestimiento de la fachada en los puntos en los que está deteriorado, y retirará también los elementos del voladizo que se encuentran en riesgo inminente de desprendimientos, para evitar daños a los viandantes, así como daños a propiedades contiguas.
Además de estas obras subsidiarias ante un riesgo inminente, el consistorio ha exigido a los dueños del inmueble que realicen obras de reparación, conservación y rehabilitación para que la vivienda tenga las condiciones imprescindibles de seguridad y habitabilidad. Así, reclama reparar el voladizo y el dintel del balcón superior, pide que se elimine y reconstruya la parte inferior del voladizo del balcón que tiene grietas, el picado del revestimiento de la fachada y que se ejecute un nuevo revestimiento uniforme, además de pintarse la fachada, teniendo en cuenta el estudio cromático del centro histórico aprobado por el ayuntamiento. Estas obras, según estima el consistorio, costarían unos 2.300 euros (sin IVA).
Respecto a la vivienda del número 24 de la calle Santa Rosa, en la que también se han producido desprendimientos, en este caso en el lateral izquierdo de la cornisa, y el pavimento de los voladizos del balcón de la primera planta está en riesgo de desprendimiento, según detallan los técnicos municipales, que señalan que habría que comprobar si los voladizos están sujetos al suelo y si no es así, habría que retirarlos para evitar que caigan a la calle. Ante el deterioro del inmueble, el gobierno municipal ha dado un plazo de diez días a los propietarios para que presenten la documentación y las alegaciones que consideren.
Riesgo de incendio
Por otra parte, el Ayuntamiento de Ontinyent ha reclamado al propietario de una caseta del diseminado a que adopte una serie de medidas necesarias para eliminar el peligro de incendio que presenta la parcela, donde la hierba silvestre ha crecido sin control. Se trata de una parcela ubicada en el paraje de la Casa Garcia Simó y pertenecen a la promotora Gilet Habitat Promociones SL, cuyo gerente falleció hace unos años. El consistorio ha intentado notificar la orden de ejecución de medidas a la nueva propiedad, aunque no ha podido, por lo que ha publicado la notificación por cauces oficiales y también en el tablón de anuncios municipal, para hacer llegar el edicto al interesado.
