Uno de los grandes partidos de la temporada ha llegado. Es tarde a las 19 horas el Barça B rendirá visita al Clariano, partido que ha levantado una gran expectación. Hay que remontarse hasta el 14 de abril de 2010 para revivir la última vez en que ambos equipos midieron sus fuerzas en el estadio ontinyentí. Fue un partido intersemanal que acabó en empate a cero, aunque el glamour no estaba en el terreno de juego sino en el banquillo, no en vano el entrenador del filial culé era Luis Enrique, actual seleccionador nacional. A unos metros, su homólogo en la cubierta ontinyentina respondía al nombre de Toni Aparicio, uno de los grandes nombres en la historia del Ontinyent CF.
Miradas al pasado que brindan un protagonismo especial al duelo de esta tarde entre dos bloques que además llegan en un buen momento deportivo: el Ontinyent no conoce la derrota desde que cayese en Alicante; mientras que el Barça acumula cuatro semanas saboreando buenos resultados. De hecho, un punto separa a textiles y culés en la tabla, cuartos y sextos respectivamente. Por tanto y, como califica Miguel Ángel Mullor, se espera «un partidazo porque los hombres del Barcelona invitan a ello, a lo que hay que unir nuestro estado de forma y la solidez en casa, dos aspectos a tener en cuenta. Un encuentro que acoge todos los ingredientes para que sea un gran espectáculo». La llegada de filiales de entidades de Primera división es una buena oportunidad para disfrutar de los futuros reyes del fútbol nacional. Aunque criticado últimamente por la falta de futbolistas que discutan la titularidad a los jugadores Top de Valverde, lo cierto es que la Masía es una escuela prolífica en grandes peloteros. Algunos de ellos pisarán el césped sintético del Clariano, con especial atención a dos que ya han debutado en el primer equipo. Se trata de Riqui Puig y Carles Aleñá. El primero con 19 años entrena con Valverde y baja al filial para competir en liga. De estatura pequeña, conduce el balón siempre pegado al pie con la inmensa calidad que atesora. Esta forma de jugar le ha causado más de un dolor de cabeza en 2ª B, por lo que desde Barcelona han bautizado como «la caza de Riqui» por las constantes patadas y faltas con cierta virulencia que sufre el futbolista de Matadepera. Por otra parte, Carles Aleñá ya ha debutado en liga con el primer equipo del Barça de la mano de Luis Enrique. La temporada pasada se lesionó y dentro del proceso de recuperación está cogiendo ritmo de partidos en el filial para ponerse a tono y volver a las órdenes de Valverde. El jugador de Mataró es internacional sub-19 por España. Dos nombres que «marcan la diferencia, no son de esta categoría. Si Aleñá no se hubiese lesionado, estaría en el primer equipo. Todo el juego ofensivo pasa por ellos, intentaremos que no sea así, sin descuidar a Mújica, un delantero referente que siempre acaba la temporada haciendo muchos goles. Nosotros tenemos muy claro lo que queremos hacer y esperamos que se pueda ver en el terreno de juego», describe Mullor.
Calahorro y Almirón, baja
Para esta confrontación, Mullor no podrá contar con Calahorro y Almirón, este último por sanción. Por su parte, García Pimienta se queda sin los internacionales por España Abel Ruiz y Miranda, el montenegrino Carevic, convocado con la sub-21 de su país y Ballou con el combinado de Canadá. Además, Saberio y Mate están lesionados. Viajan con el equipo los juveniles Konrad de la Fuente y Nil Mortimer.
Un encuentro para el que la junta directiva del Ontinyent ha decretado Día del Club. El ritmo de venta de entradas parece que ha sido constante por lo que desde el staff técnico del Ontinyent comentan estar «muy contentos porque durante la semana hemos visto movimiento de gente comprando entradas que nos hace pensar que ante el Barça el campo estará rozando el lleno. Sabemos que la afición estará con nosotros. Esperamos conseguir que se enchufen a base de buen juego y ocasiones», concluyen.
