Con solo 17 efectivos viaja el Ontinyent a la Ciudad Condal para enfrentarse al Barça B (hoy, 18h.) en un encuentro donde las ausencias exigirán un sobreesfuerzo a los desplazados. Como avanzó este diario ayer, la columna vertebral del ataque ontinyentí se ha roto con lesiones de hombres clave en el peor momento de la temporada. Al técnico del Ontinyent no le queda otra que echar mano del juvenil para no dejar el banquillo vacío de efectivos.
Aun así, Vicente Parras se agarra al clavo ardiendo de la última visita a Barcelona en la que un Ontinyent también escaso de recursos fue capaz de cazar tres puntos ante el filial periquito. «Nosotros somos conscientes que vamos con bajas importantes, sobre todo limitados en cuanto a alternativas según vaya el partido y que vamos a tener que trabajar mucho y ser muy solidarios. Pero también sabemos que son circunstancias muy similares al partido contra el Espanyol B y allí ganamos con un gran trabajo colectivo».
Una ilusión contagiada a las cerca de 40 personas de la Penya La Torreta que se van a desplazar al Miniestadi para dar su apoyo a un equipo que ahora más que nunca necesita el aliento de su gente. No les importa si esta tarde no se visten de corto David Torres, Tito, Calahorro, Alex Felip y Tarí.
Con todo lo que se juega el Ontinyent en el terreno deportivo y cuando parecía que los asuntos extradeportivos habían quedado aparcados hasta final de temporada, de nuevo emergen las inquietudes en el seno del club del Clariano. Esta misma semana, los jugadores cobraron el mes de diciembre, de acuerdo con la promesa de los empresarios de la ciudad de aportar liquidez hasta que lleguen las subvenciones. En este sentido, el entrenador Vicente Parras ha anunciado el abono del último mes de 2018 pero al mismo tiempo ha querido enviar un mensaje a todos los estamentos del club para que colaboren con las personas que han salvado momentáneamente al club. «Hoy nos han pagado la nómina de diciembre, me consta que gracias a la implicación personal de Salva García. Pediría la máxima colaboración por parte del administrador, presidente, junta directiva, para facilitar el trabajo tanto a Salva como a los demás y así poder cumplir con los plazos que nos han dicho para el pago de las nóminas de enero y febrero».
Y es que al parecer hay un mutismo total por parte de los rectores del club con las personas que han aportado dinero para avanzar las nóminas de noviembre y diciembre, especialmente con Salva García quien ha manifestado a Levante-EMV que baraja «no poner más dinero en el Ontinyent por falta de colaboración e información por parte de la actual junta directiva, así como de las instituciones». Unas declaraciones que van en consonancia a lo que exige Parras, que todos se impliquen y remen en la misma dirección y miren por la viabilidad del club, incluso el administrador, a quien García cursó un aviso para hablar a principios de semana y hasta ayer por la noche no hubo respuesta. García no ha hablado con Luis Ortiz, presidente del club, desde «la última asamblea», y reconoce que está llevando a cabo «gestiones que no nos tocan hacer» y que «pertenecen a otros».
Garrido, despedido
El director deportivo del Ontinyent, Luis Miguel Garrido, ha sido cesado de sus funciones y por tanto dejará de ser trabajador del club en las próximas horas.
