Miguel Soro da un salto adelante. Y así, pasito a pasito, el pintor de Xàtiva sigue escalando posiciones en el complicado mundo del arte, donde ya tiene voz y voto desde hace algunos años. Con un estilo tan personal que despierta reconocimientos internacionales y con el que el artista plástico setabense ha hecho frente sin miedos ni complejos, sus composiciones inspiradas en el mundo del ciclismo se han convertido ya en una seña de identidad que no tiene ningún competidor. Simplemente porque Soro ha afrontado el reto demostrando lo que es capaz de hacer en directo, mientras el gran pelotón entra en las metas de las diferentes rondas ciclistas del mundo.
Fundamentalmente, las tres grandes rondas europeas: Tour de Francia, Giro de Italia y Vuelta a España han visto a Miguel Soro llenar un lienzo y conjugar arte con deporte. Su amor por el ciclismo le ha llevado a crear colecciones protagonizadas por grandes mitos de la bicicleta, y con ellas despertar la admiración de propios y extraños. Su predilección es crear sobre lienzo y con la técnica del collage su pasión ciclista, con sus ídolos preferidos.
Ahora, el artista setabense da un paso más allá: desde finales de junio y hasta el 8 de septiembre expone en el Museo de Bellas Artes de la ciudad francesa de Pau, con un doble motivo: la muestra coincide con una etapa del Tour, y con otra de la Vuelta a España. Así, la exposición de Soro coincidió con la decimotercera etapa el Tour de Francia, una contrarreloj individual de 27,2 kilómetros que tuvo lugar en esta ciudad, y donde Miguel Soro pintó en directo, en la calle, mientras fueron acabando la prueba los ciclistas de la ronda gala. Además, la muestra concitó la visita de campeones del Tour como Bernard Hinault, Joop Zoetemelk y Bernard Thevenet, así como míticos clasicómanos como Duclos Lassalle. El exciclista de Xàtiva emocionó a las leyendas que se vieron reflejadas en sus lienzos. Soro no daba crédito en su exposición de Pau al hecho de recibir la visita de grandes mitos del ciclismo y del Tour. «Me gusta la época de los años 30 hasta los 60, el viejo ciclismo de colores grises que representan aquellos tiempos. Me gusta Coppi y es el que me permite vivir». El setabense también admira la leyenda de José Manuel Fuente, El Tarangu; a Luis Ocaña, que según Soro «era Dios»; y de los ciclistas actuales a Peter Sagan y Alejandro Valverde. Al murciano le hará pronto un cuadro que la Comunitat Valenciana regalará al campeón mundial. Entre cuadro y cuadro, Soro sigue el Tour de Francia, «un evento enorme dentro del ciclismo», recalca.
Este año el Tour de Francia cumple 100 años desde la creación del actual maillot amarillo, prenda distintiva que se creó en su onceava edición: en 1919. Por ello, cada día el líder de la general lleva una elástica diferente con el rostro de los grandes mitos de la ronda francesa. Hay 20 maillots diferentes entre los que destacan los de Anquetil, Merckx, Hinault e Indurain, ganadores todos ellos del Tour en cinco ocasiones.
Por otra parte, Soro también expone en Pau coincidiendo con la Vuelta a España, que dará comienzo el 24 de agosto, y tendrá en su décima etapa, prevista el 3 de septiembre, la ciudad de Pau como final de etapa de otra contrarreloj, la que se disputa entre Jurançon y Pau, de 36,1 kilómetros. La ciudad francesa acogerá a los ciclistas que habrán llegado el día anterior, que será de descanso. De nuevo el pintor de Xàtiva será protagonista pintando en la línea de meta. Soro, el pintor del Tour de Francia y de la Vuelta a España.
