El responsable de Medio Ambiente de la Mancomunitat de Municipis de la Vall d'Albaida y alcalde de Fontanars dels Alforins, Julio Biosca, se reunió ayer con la presidenta del consejo de administración de Girsa, la diputada provincial Mentxu Balaguer, y con el gerente de la empresa, Luis Tejedor, para solicitar la cesión de la totalidad del espacio de las instalaciones de Girsa, en las que la Canera de la Vall d'Albaida tiene su sede. Una medida con la que la perrera mancomunada dispondría de «más terreno para los perros rescatados, y más espacio para organizar actividades de sensibilización para la adopción de mascotas abandonadas», según ha explicado Biosca.
Mentxu Balaguer, por su parte, se ha comprometido a estudiar la propuesta «para llegar a una solución óptima con la que mejorar las prestaciones y el servicio que la perrera ofrece a los pueblos mancomunados en este servicio».
El servicio mancomunado de la perrera de la Vall d'Albaida, según destacan desde la Diputació de València, conjuga los criterios de respeto a los animales con los de salubridad pública, con el objetivo de ayudar a los propietarios de perros a su recuperación en caso de que se pierdan. Para los canes abandonados, se aplica el convenio firmado con una protectora, que prioriza la búsqueda de una familia responsable que se haga cargo del mismo. Los perros salen de la Canera ya vacunados contra la rabia, desparasitados y con chip y pasaporte.
Desde la Mancomunitat de Municipis de la Vall d'Albaida trabajan en contacto permanente con las protectoras de la comarca para diseñar estrategias conjuntas que mejoren el servicio.
