La Policía Nacional escolta al árbitro del partido entre el Ontinyent 1931 y la UD Castellonense

El entrenador local y uno de sus jugadores fueron expulsados antes de que terminara el encuentro y el conjunto de la Vall d'Albaida ha presentado un recurso

Imagen del final del encuentro celebrado entre el Ontinyent 1931 y la UD Castellonense.

Imagen del final del encuentro celebrado entre el Ontinyent 1931 y la UD Castellonense. / Ontinyent 1931

Ontinyent 1931 y UD Castellonense empataron ayer a un gol tras un intenso partido celebrado en el Clariano. Y, tras acabar el encuentro, una patrulla del cuerpo de la Policía Nacional (CNP) escoltó al árbitro, que solicitó la presencia de los agentes a las siete de la tarde debido a las amenazas que le habían proferido un grupo de aficionados locales. Así, según consta en el parte al que ha tenido acceso este diario, el colegiado solicitó la presencia de los agentes tras comunicar al 112 que había recibido amenazas por parte de los aficionados.

Todo apunta a que fue un partido intenso, entre el primer y cuatro clasificado de una competición que se prevé apasionante hasta el final de liga

Así, una patrulla de la Policía Local de Ontinyent también acudió al estadio tras ser requeridos por la CNP. Los agentes locales confirmaron que no había granes problemas tras su llegada al estadio. Así, observaron que "no había situación violenta" y constataron que la seguridad del campo desconocía la posible incidencia: "El árbitro manifestó que se sentía amenazado, pero desconocía quiénes eran los autores". En la grada había centenares de personas, no es fácil distinguir de quién vienen las amenazas desde el césped.

Así, los agentes informaron al árbitro de los derechos que le asistían y la CNP se hizo cargo de su salida y las gestiones pertinentes.

Recurso

Miguel Ángel Mullor es el actual presidente del Ontinyent 1931. Consultado por lo ocurrido por este diario, ha explicado que han recurrido el acta del partido, en la que el árbitro desgrana lo que pasó: "Acabo de presentar un recurso en la Federación. No pasó lo que dice. Al final, nuestro delegado de campo le acompañó al coche".

"A ver, esto es fútbol. Yo no defiendo lo indefendible ni las amenazas. Es cierto que la Policía acudió y habló con el árbitro. Había gente exaltada. El colegiado no tuvo su mejor día, la lió un poco. Pero no fue a mayores".

Roberto Bas, entrenador local, y el jugador Casti acabaron expulsados antes de que terminara el encuentro. De hecho, el propio jugador se refirió a la acción en su propio perfil en la red social Twitter: