Moixent proyecta un bosque de ribera que dé sombra a la avenida del polígono

El cambio climático es más que una evidencia y las jornadas de altas temperaturas y mucha calor aumentan cada año y son cada vez más habituales no sólo en los típicos meses de verano, sino antes y después de cerrarse la temporada estival. Por ello, los ayuntamientos están proyectando medidas para paliar estas situaciones climáticas de altas temperaturas, con el fin de crear “refugios climáticos” para la población. Moixent va a sumarse a las localidades que planean actuaciones en este sentido y la localidad de la Costera proyecta la creación de un bosque de ribera en la zona entre la “periferia” del núcleo urbano, el polígono industrial y la zona agrícola, un “refugio tanto para especies vegetales autóctonas como un refugio natural para las personas, sobre todo en épocas estivales, para protegerse de las altas temperaturas”, remarca la memoria técnica del proyecto previsto. Un proyecto que ya se ha licitado, por un presupuesto de 58.812 euros, para los que el consistorio cuenta con una subvención de la conselleria para acciones contra el cambio climático. Los trabajos se ejecutarán en un plazo de dos meses a partir de su adjudicación.

El bosque de ribera y de monte se creará en la zona de la avenida de las Hijas de la Caridad, una calle que conecta el núcleo urbano y el polígono, y la actuación pretende mejorar paisajísticamente y medioambientalmente este enclave, así como tener una mayor calidad ambiental y mayor integración en esta zona periférica de la población.

La parcela que albergará el pequeño bosque de ribera se sitúa en la avenida, junto al Barranc de la Fos, que conserva especies vegetales típicas de ribera como el olmo, el almez (llidoner), el chopo o las adelfas, y es una parcela rectanguar de unos 4.500 metros cuadrados.

La actuación prevista contempla la habilitación de un paseo peatonal paralelo a la acera de la avenida y la plantación de una línea de arbustos (murtas) junto a la acera, que servirá como separación entre el tránsito de la avenida y la zona verde, una barrera vegetal apoyada también por una alineación de llidoners plantados junto a las murtas, que proporcionarán sombra al paseo. Al otro lado del paseo y junto a las palmeras que actualmente se encuentran en la zona, se sembrarán plantas arbustivas y árboles frondosos como fresnos. La actuación también proyecta, en la otra parte de la parcela, un camino sinuoso con árboles y arbustos que formarán una vegetación tupida que dará sombra y cobijo a los paseantes, así como para la fauna silvestre, recalca la memoria técnica.

Al final de la parcela, junto al límite con el polígono industrial está previsto un cercado cerrado para perros y mascotas. En la entrada del jardín se situará una pérgola metálica con trepadoras que sirva como resguardo de las altas temperaturas en los meses más cálidos.

Los trabajos de la actuación abarcarán el desbroce y la limpieza de la parcela, movimientos de tierra y la instalación de riego por goteo para las especies vegetales que se plantarán. También está prevista la ejecución de obra civil para actuaciones de soporte como la colocación de zapatas de hormigón para la pérgola, las acometidas de agua potable y la instalación de la valla metálica. Además, se instalará tela metálica en la zona para mascotas. El entorno se mejorará con mobiliario urbano.

Las especies vegetales que se plantará serán, principalmente, especies de ribera como olmos, sauces y fresnos, combinados con otros menos de ribera pero también autóctonos como encinas, roble valenciano, así como cipreses, que se combinarán con palmeras. Entre las plantas arbustivas como adelfas, mirtos, arbustos pequeños y hierbas trepadoras como la lonicera y la clemátides.

El proyecto técnico subraya que se ha elegido esta actuación entre varias ideas contempladas, por ser la solución que “mayor utilidad le proporciona a la zona, la que mejor engloba la idea de integrarla en el entorno, siendo además económicamente razonable, viable y sostenible”, aseguran.

El alcalde de Moixent, Guillermo Jorques, ha explicado a este diario que la actuación busca “aprovechar un espacio en una zona semiabandonada para replantar árboles y mejorar el entorno con un bosque con el que queremos, además, contribuir, dentro de nuestras posibilidades, a combatir el cambio climático”. Jorques señala que la localidad no dispone de excesivas zonas de sombra y la iniciativa ayudará a paliar esta carencia. El primer edil expone que la zona donde se proyecta el refugio climático es “una zona anexa a la reparcelación del polígono que hicimos, y la idea es utilizar los márgenes de esta avenida para desarrollar el proyecto”, que confían que pueda adjudicarse “en agosto para iniciar cuanto antes la actuación”, remarca. “Creemos que quedará muy bien porque además del bosque de ribera también habrá una pérgola, con mobiliario urbano y zona de esparcimiento, además de una zona para mascotas”, concluye el alcalde.