Navarrés asegura un caudal óptimo en Playamonte y estudia ampliar el aforo

El ayuntamiento firma un convenio con los regantes que garantiza el encauzamiento del agua del manantial Las Fuentes y su posterior reconducción desde el lago a las acequias para reutilizarla en el regadío

Visitantes en el lago de Playamonte, en Navarrés, este verano.

Visitantes en el lago de Playamonte, en Navarrés, este verano. / Agustín Perales

R.Tomàs.

El Ayuntamiento de Navarrés y la Comunidad de Regantes de la localidad de la Canal han firmado un convenio para el encauzamiento de las aguas procedentes del manantial Las Fuentes por la acequia “Del Común” y de ahí al lago Playamonte, con el objetivo de dotar a este singular enclave de aguas de la máxima calidad. Playamonte ha conseguido este año la bandera azul, el certificado de calidad que se otorga a las playas por reunir cualidades de excelencia, seguridad y calidad. El lago de Navarrés ha sido, además, la primera playa interior en conseguir esta distinción en la Comunitat Valenciana.

El convenio viene a rubricar sobre el papel un acuerdo anterior entre las dos entidades, después de que el ayuntamiento rehabilitara la zona del lago para que las aguas del mismo también pudieran servir para el riego de los campos. El convenio firmado ahora expone que la Comunidad de Regantes encauzará diariamente y de modo continuado las aguas procedentes del punto de suministro del nacimiento de Las Fuentes por la acequia “Del Común” hacia el lago. El documento también señala que “excepcionalmente no se encauzará el agua hacia el lago Playamonte cuando haya peligro de lluvias torrenciales o de consideración, para evitar posibles inundaciones y realizar un correcto y ordenado encauzamiento de las agua hacia el río”.

Para efectuar la canalización del agua desde el manantial hacia el lago, los regantes destinarán un motor de los que dispone la comunidad. Para ello, realizarán las actuaciones necesarias, como la adaptación del motor, mantenimiento y reparaciones del mismo, así como dotación de la energía eléctrica, para realizar dicho encauzamiento.

Por su parte, el Ayuntamiento de Navarrés se compromete a costear y pagar “todos los gastos que se deriven” de las actuaciones que realice la Comunidad de Regantes para la implantación del servicio y su primera puesta en marcha. El consistorio abonará estos pagos “de forma directa, con cargo a su presupuesto municipal”.

El alcalde de Navarrés, Federico Argente, ha explicado a este diario que el convenio asegura que “el agua que pasa al lago es de calidad excelente”. Además, señala que el agua “se reutiliza para el riego. El agua que llegará al lago, después la reconducimos a las acequias para que la comunidad de regantes pueda utilizarla en el riego de sus campos”. Un proceso circular del agua para evitar su pérdida y su máximo aprovechamiento, destaca el primer edil, que ensalzaba también la calidad y la potencia de las aguas del manantial Las Fuentes, “que hasta este verano no ha sido necesario emplear un motor. En año de lluvias no es necesario el motor, el agua es suficiente”, recalca Argente. La localidad se abastece de agua potable de otro pozo, aunque dispone también de este en caso de necesidad, apunta el alcalde.

Federico Argente manifiesta que el objetivo de este convenio, además de garantizar un agua de buena calidad al lago, es “plasmar en un documento el compromiso del acuerdo y dejar todo el proceso claro. Que el acuerdo al que llegamos en 2018, tras rehabilitar el lago, quede reflejado en un documento escrito y firmado a cumplir por las dos partes, y que perdure en el tiempo, aunque se produzcan cambios políticos en el ayuntamiento o haya cambios en la directiva de la comunidad de regantes”.

El lago de Playamonte, distinguido este verano con la bandera azul por la calidad del paraje.

El lago de Playamonte, distinguido este verano con la bandera azul por la calidad del paraje. / Agustín Perales

Visitantes a Playamonte

El convenio también permite potenciar el lago Playamonte, que este año estrena la bandera azul, una distinción que ha atraído numerosos visitantes al paraje. El alcalde destaca que “la bandera azul se ha notado y mucho. Ha sido todo un logro y ha permitido que el lago se conozca más y venga más gente. Todos los fines de semana tenemos que cortar el acceso, se agotan las entradas”, recalca. El aforo está limitado a 600 personas por día, “para no sobreexplotar el paraje”, y Argente avanza que “de cara al año que viene veremos si lo subimos”, ante la gran afluencia de visitantes registrada este verano. El alcalde explica que este año se puede adquirir la entrada a través de internet, que también permite hacer la reserva, con lo que se facilita la visita de turistas de fuera.