La plaga de la procesionaria daña ya 2.100 hectáreas de pinos en la Costera y la Canal

El nivel de infestación del insecto se ha duplicado en 2023 en ambas comarcas con un 6% de ejemplares afectados por defoliaciones severas o medias

La Canal presenta los mayores índices de decaimiento de enebros de la provincia

Características bolsas de procesionaria en un pino, en una imagen de archivo.

Características bolsas de procesionaria en un pino, en una imagen de archivo. / VICENT M PASTOR

Sergio Gómez

Sergio Gómez

La plaga de la procesionaria del pino ha alcanzado este año niveles de infestación inéditos desde 2019 en las comarcas de la Costera y la Canal de Navarrés, tras duplicarse la superficie en la que se registra un volumen medio o alto de presencia del insecto

La procesionaria, que suele hacerse especialmente visible en invierno cuando anida en las copas de los árboles, se concentra de manera elevada en la Costera (con un nivel 4 sobre 5 en la escala de infestación), donde se han observado en este 2023 defoliaciones severas (caída prematura de hojas) en 223,83 hectáreas de pinares (el 1,91% del total de la masa arbórea de estos ejemplares en la comarca), según la última prospección del estado fitosanitario de los montes valencianos desplegada por la Conselleria de Medio Ambiente.

La procesionaria, que constituye la plaga forestal más extendida en el territorio valenciano, presenta además un grado de infestación medio alto (equivalente a un nivel 3) con defoliaciones en los bordes en 1.849 hectáreas de la Canal de Navarrés (el 4,55% de la superficie de pinos de la comarca) y 198 hectáreas de la Vall d'Albaida (el 1,21%). En un estadio medio bajo de infestación (nivel 2) se hallan otras 2.897,88 hectáreas en las tres comarcas.

Los efectos ocasionados por la oruga son muy visibles a simple vista, tanto por la presencia de bolsones como por las defoliaciones que experimentan los pinos, además de los problemas que puede provocar para la salud de las personas y de los animales.

Los niveles globales de infestación de la procesionaria han crecido este año respecto a 2022 en el conjunto de la Comunitat Valenciana. En las tres comarcas, la superficie de pinar libre de la plaga se ha reducido en un año en casi 4.000 hectáreas, un 7%.

Aun así, se estima que el 85,54% de la extensión de pinos de la Costera (10.000 hectáreas) sigue escapando a la procesionaria, un porcentaje que desciende al 79,42% en el caso de la Vall d'Albaida (13.017 hectáreas de pinos sin rastro del insecto) y al 72,12% en la Canal de Navarrés (29.299 ha), el territorio con más extensión forestal y el que más índice de infestación de procesionaria presenta de los tres tras duplicarse respecto a 2022 hasta situarse en 0,42, dentro de la media de la provincia de Valencia.

La Costera es una de las cuatro comarcas valencianas en las que este año se han observado daños graves por la procesionaria

El indicador es mucho más bajo en la Costera, aunque aquí también se ha multiplicado por dos, hasta el 0,22, y esta es una de las cuatro comarcas valencianas en las se han observado daños graves por la procesionaria (por primera vez desde 2016), junto al Rincón de Ademuz, la Serranía y la Ribera Alta.

Por su parte, la Canal es la segunda comarca de la provincia con más hectáreas de pinar que registran un volumen de presencia medio de la procesionaria, con 3.900 ha, casi el 10% de la superficie total. La plaga está presente en un nivel bajo en 7.420 hectáreas de la Canal, 1.207,5 ha de la Costera y 2.593,5 ha de la Vall d'Albaida.

La sequía y las altas temperaturas provocan que la procesionaria del pino avance su metamorfosis, lo que ha obligado en los últimos años a los ayuntamientos a adelantar y reforzar las tareas de control y mantenimiento de pinares en ambientes urbanos.

Decaimiento de enebros en la Canal

Por otra parte, la prospección fitosanitaria de la conselleria también ha detectado afecciones muy importantes por la fisiopatía que provoca el decaimiento de enebros en la Canal de Navarrés, donde también se localiza la mayor frecuencia de registros de la roya del enebro, otra plaga parasitaria menos extendida.

En las tres comarcas se han identificado igualmente un 4% del total de ejemplares arbóreos muertos por la acción de insectos perforadores en la Comunitat Valenciana (68 bajas en total).

Además, el puntisecado del pino carrasco está presente en prácticamente todas las comarcas de la provincia, si bien, por su mayor incidencia, destacan la Canal, los Serranos y la Plana de Utiel-Requena.